"Me respetan quizá más que a un ingeniero"
Mónica Cuadrado es la única ingeniera de Pirelli asignada a los equipos de F1, barcelonesa de 28 años, siempre le gustaron las carreras: “De niña tenía barbies… y coches”.
Parece tímida Mónica, discreta incluso, concentrada seguro en su trabajo. Conocí a esta barcelonesa de 28 años en un avión, cansada, sin poder dormir, un clásico de estos trabajos de la Fórmula 1. Ella es la única ingeniera de Pirelli en los grandes premios en el suministrador de neumáticos se sienten orgullosos de su trabajo y ella responde con esfuerzo, trabajo y talento.
En Suzuka hablamos con Mónica, una de esas pioneras que van golpeando en un universo masculino como la Fórmula 1, rompiendo el techo de cristal, aunque por aquí tenga refuerzo de fibra de carbono…
-Empecemos por el principio Mónica. ¿Qué hace una chica como tu en un sitio como este?
-Pues estoy aquí porque me gustan los coches y pertenezco a las carreras
-Es uno de los guardianes de Pirelli, podríamos decir así.
-Podría ser, sí, podría decirse así.
-¿Cómo se llega a ser ingeniero de Pirelli?
-Estudiar mucho, coger experiencia trabajando en cosas que hay antes de Fórmula 1 porque todo el mundo habla de la Fórmula 1, pero hay mucho más detrás antes de llegar aquí.
-¿Siempre quisiste estar en las carreras?
-Desde pequeña, pequeña quizá no, aunque aparte de las barbies también tenía coches, legos de coches, playmobil, cosas así, intentaba desmontar cosas… supongo que todo empezó ahí y cuando empecé a ser más mayor siempre era muy buena en matemáticas en el cole, en Física cuando empezamos con eso… y después hice Ingeniería Técnica Industrial especializada en Mecánica, eso antes de los títulos europeos, finalmente hice un máster en Inglaterra en Motorsport.
- Y a partir de ahí a trabajar hasta llegar a la Fórmula 1.
-Cuando acabé el máster empecé a trabajar en Lotus Cars en Inglaterra, en Norfolk como ingeniera de diseño y fui progresando poco a poco, me moví a la parte de Motorsport dentro de Lotus Cars, pero la empresa estaba pasando por algunas dificultades e íbamos rotando, donde hacía falta gente allá íbamos y acabé trabajando en el departamento de motores, diseñando. El proyecto más grande que hice fue la caja de cambios del Lotus Exige que es como el proyecto más bonito en el que he trabajado aparte de Pirelli.
-En Pirelli tienen un grupo de ingenieros que cada uno está con un piloto, dos por equipo, estás en la élite, ¿cómo entraste en Pirelli?
-Bueno… simplemente ellos anuncian que necesitan gente, envías tu curriculum , como en cualquier otro trabajo, y si cumples con los requisitos mínimos pues te llaman o no te llaman…
-Y te llamaron y eres la única ingeniera de Pirelli en Fórmula 1.
-En Fórmula 1 sí, en otros departamentos sí hay más chicas, hay otra ingeniera también que es inglesa dentro de Pirelli aunque no en Fórmula 1, también hay chicas trabajando en logística, aquí tenemos a otra chica que viaja todas las carreras y es de Turquía, también en Milán hay una chica que se encarga de toda la organización logística de las Blancpain GT Series y hay varias sí.
-Incluso en Fórmula 1 cada vez hay más mujeres.
-Sí, la verdad es que poco a poco ves más mecánicas, más ingenieras…
-¿En qué consiste tu trabajo?
-Mi rol consiste es ser el punto de conexión entre Pirelli y el equipo en el que estoy asignada que ahora es Haas y el pasado año era Red Bull, siempre tengo que tener el control de qué es lo que está en el coche y lo que hay que comprobar, por ejemplo el desgaste de los neumáticos es algo de lo que nos encargamos los ingenieros de Pirelli, le pasamos la información a los equipos, estamos pendientes de la degradación etc… Nosotros no dictamos estrategias, pero los datos que les damos es lo que usan para saber cuantas vueltas máximas por ejemplo pueden dar al circuito etc.
-¿Qué es lo más duro de este trabajo?
-Es un trabajo duro sí, sobre todo de muchas horas, como todos los trabajos aquí en Fórmula 1 ya lo sabes, muchas horas, muchos vuelos largos, cansados, eso es lo más duro y sobre todo no poder estar cerca de la familia. Yo ahora vivo en Inglaterra desde hace seis años, al principio mis padres se vinieron conmigo cuando estaba estudiando, tenía 22 años y no me quería dejar sola aún y luego se fueron cuando empecé a trabajar en Pirelli porque con todos los viajes era imposible que pudieran vivir conmigo porque apenas íbamos a estar juntos.
-¿Ha tenido alguna dificultad añadida por el hecho de ser mujer? ¿O le tratan mejor? ¿Peor?
-No… yo creo que a veces es incluso más fácil, porque en situaciones de estrés a veces la gente responde mal, pero a mi como que me respetan un poco más sí, diría que a veces si.
-¿Lo más complicado que le toca vivir en el trabajo?
-Cuando ha habido algún daño en el neumático y tienes que decir que no se puede rodar y te intentan convencer, ‘venga pero para una vuelta…’ y tienes que decir no, porque sabes que hay cosas que pueden ir mal en ese caso.
-Debe ser increíble estar ahí en el centro de la Fórmula 1…
-Sí, es lo que más me gusta es que estoy justo ahí, en el centro de la carrera, dentro del garaje en todas las sesiones, en el meollo, no se puede estar más cerca a no ser que seas el piloto, pero es un poco tarde para eso.
-¿Le hubiera gustado?
-No hubo la oportunidad porque yo cuando estaba en el colegio, que es cuando tienes que empezar a hacer karting, estaba haciendo gimnasia rítmica que es completamente diferente a lo que hay aquí (risas).
-¿Tiene un piloto favorito?
-Les tengo mucho respeto a todos, quizá cuando era mucho más joven tenía alguno favorito, pero ahora ves lo que se tienen que implicar cada uno de ellos aunque sea para ser el veinte que hay que valorarlo.
-Lo estamos viendo ahora con Alonso.
-Y con Carlos, con Carlos Sainz…
-Por supuesto. De todas maneras por su edad, ¿es de las que se aficionaron por Alonso, o en realidad no?
-Yo crecí viendo a Alonso, con su primer Mundial yo tenía quince años, era muy guay, pero…. yo vivía en Barcelona y teníamos TV3 y cuando estaba Schumacher ganando los Mundiales yo lo veía, es algo que en el resto del estado no había tanta facilidad para verlo, nosotros tomábamos el vermut antes de comer el domingo y lo veíamos al Kaiser. Luego llegó Alonso y lo ganó sí.
-Y después muchos años después una ingeniera española en la Fórmula 1.
-Aquí estamos sí, trabajando mucho.
-Felicidades Mónica y buen trabajo.
-Gracias