Alonso implanta el ‘segundo debrief’ en Toyota
Alfonso Calabia, ingeniero español del equipo nipón, habla sobre la evolución del asturiano en la Resistencia.
El piloto ideal de un prototipo híbrido de Resistencia tiene que ser rápido, pero también eficiente. Para eso es imprescindible adelantarse en las frenadas pisando el pedal primero con suavidad y luego con más fuerza, ayudando al sistema híbrido a recuperar energía que luego se utilizará para propulsar el coche a través del tren delantero.
Mientras tanto, sistemas como el control de tracción, subviraje o equilibrado de la frenada convierten la conducción en algo mucho más complejo que un simple acelerar-frenar. Y cuando la fiabilidad es clave, en una carrera de seis, doce o 24 horas, prestar atención total a cada detalle desde dentro del coche para comunicar una irregularidad a los ingenieros es fundamental.
La de este domingo fue la tercera carrera de Alonso con Toyota en el WEC, pero su adaptación desde la F1 ya parece total. “Desde Spa no ha evolucionado mucho porque ya se había ajustado muy rápido durante la pretemporada con los test y el simulador. Llegó a Bélgica muy preparado, estaba al nivel de los demás pilotos”, comenta Alfonso Calabia, ingeniero español responsable del control de sistemas en el TS050 Hybrid. “Ahora está entendiendo poco a poco lo que los sistemas están haciendo detrás de él”, cuenta.
¿Había visto una adaptación tan rápida? “No. Y hemos probado a muchos pilotos que vienen de monoplazas. Quizás Kamui (Kobayashi) a veces la conserva cuando tiene un coche delante y quiere adelantarlo sin esperar”. Sobre la implicación del asturiano en el apartado técnico del coche y con los ingenieros, Calabia lo describe con una anécdota: “Una de las cosas que sí me sorprendió de él es que todos hacemos al final de la carrera hacemos un briefing en el camión. Los pilotos cuentan lo que ha pasado o si hay algún problema que mejorar. Los ingenieros también hablamos. Lo que él hizo que nadie había hecho antes es enviar un correo electrónico, literalmente llamado ‘segundo debrief’, con sus comentarios dirigidos a cada ingeniero. Con más información, más detalles”.
Sorprendió a muchos cuando empezó la temporada su empeño por comprender los manuales del coche y las actualizaciones correspondientes a cada sistema. Ahora, después de varios meses trabajando juntos y un triunfo en Le Mans, a nadie le llama la atención cómo se vuelca Alonso con el equipo Toyota.