Martín ejerce de ‘Martinator’ y se va más líder de vacaciones
El madrileño logró romper el numeroso grupo de cabeza a ocho vueltas del final y se escapó camino de su quita victoria del año. Podio de Bezzechi y McPhee.
No engañaba Jorge Martín cuando, en la rueda de prensa de la pole, aseguraba que la estrategia para la carrera de Moto3 en Sachsenring sería conservar al principio y tirar al final. Cumplió lo que vaticinó y pudo celebrar su quinta victoria de la temporada, ejerciendo de Martinator, como le llama su padre, para irse de vacaciones un poco más líder de lo que llegó a la parrilla de la carrera alemana.
Cinco puntitos más para el madrileño de ventaja sobre el segundo, un Bezzecchi que esta vez no falló, como en Assen, y salvó los muebles con un buen segundo puesto, tras batir a McPhee por tan sólo 56 milésimas en la línea de meta. La renta no es mucha, de siete puntos, pero Martín se irá líder de vacaciones, que uno de los objetivos que se había marcado. Su ventaja sobre el primero de sus perseguidores fue de dos segundos y medio, y la comenzó a forjar a partir de la vuelta 20, a 8 del final. Hasta ese momento, el de Honda permaneció en las posiciones de cabeza permanentemente de un numeroso grupo que llegó a tener hasta 19 integrantes. A veces se cortaban algunos, pero pronto volvían a reagruparse con tanto adelantemiento.
Se llegaron a ver cinco líderes diferentes, el citado Martín, Ramírez, que acabó cuarto, sin opciones de podio y sólo 92 milésimas por delante de Canet, Arbolino, Di Gianantonio y Arenas. Estos dos últimos se cayeron y en el arrastrón del italiano estuvo a punto de llevarse consigo a Martín, tras intentar colarse por dentro en el final de recta, dudar y acabar cayéndose. Una pena por él, porque hasta la fecha era el único piloto de la categoría que había puntuado en todas las carreras, y una suerte para Martín, que a punto estuvo de irse al suelo como en Jerez, sin ser su culpa. En cuanto Arenas, otra lástima, porque se cayó cuando rodaba tercero y se le veía en disposición de pelear por el podio hasta el final.
Otros que se cayeron fueron Ogura y Rodrigo, y también lo hicieron juntos López, que se dislocó un hombro, y Bastianini. El que se salvó por los pelos fue Raúl Fernández, que le sacó de pista Dalla Porta en la curva de entrada a meta y pudo volver apuradísimo y vigesimoquinta posición, a ocho segundos del grupo. Su remontada a partir de ahí fue grandiosa y le llevó hasta la novena plaza, lo que no está nada mal para el líder del Mundial Junior, que corre aquí en sustitución del lesionado Binder.
En cuanto al otro español en liza, Masiá ha hecho un buen sexto, lo que también está muy bien para un debutante que fue capaz de terminar cuarto hace dos semanas, en Assen. Sigue habiendo presente y futuro para el motociclismo español.