Márquez gana a las Yamaha y puede ser campeón en Malasia

Otra carrera para el recuerdo de MotoGP en Phillip Island, un circuito muy propicio para que haya espectáculo, y saldada con la importantísima victoria en clave de título de Márquez. El español ha firmado su sexto triunfo del año y, sumado al fiasco de Dovizioso, que sólo ha podido ser decimotercero, se encuentra a las puertas de su cuatro título en la clase reina y sexto en todas las categorías.

La diferencia en la general entre ambos ahora pasa a ser de 33 puntos, con lo que una victoria o un segundo puesto el próximo domingo en Malasia, independientemente de que allí ganara Dovizioso, haría campeón a Márquez. En realidad, al de Honda le basta cualquier combinación que suponga no perder más de siete puntos respecto al de Ducati para finiquitar la temporada en Sepang, pero lo realmente importante es que ahora su ventaja es enorme y sólo una hecatombe podría apartarle del objetivo.

La carrera australiana ha sido preciosa, con un grupo de cabeza que durante buena parte de la misma ha estado formado por ocho pilotos. Ahí viajaban Márquez, Rossi y Maverick, que son los que le han acompañado en el podio tras cruzar la meta a 1.8 de distancia, Zarco, Crutchlow, Iannone, Miller y Rins, y nos han regalado un sinfín de pasadas. El novato de Suzuki ha ido todo el rato a cola de pelotón, sin poder meter rueda y descolgándose al final, pero seguro que ha disfrutado y aprendido más que nadie con una carrera que por momentos ha vuelto a parecerse más a una de Moto3 que a una de MotoGP.

Hasta cinco pilotos diferentes han liderado, los tres que han acabado en el podio más Zarco y Miller. Es increíble que sólo hayan pasado 23 días desde que el australiano se fracturara la tibia derecha haciendo trial. Ha sido él quien ha comenzado a estirar el pelotón al principio con un intento de escapada que ha llegado a las ocho décimas de ventaja.

El caso de Zarco también requiere mención especial. El galo es un jabato que en su año de debut se ha granjeado ya enemigos importantes por su agresividad. Ha estado a punto de liarla en la curva 4 de la tercera vuelta, momento en el que ha tocado a Márquez y éste ha aguantado milagrosamente en su sitio mientras el del Tech3 se abría y perdía posiciones. Pero él no ha sido el único que ha repartido estopa. Se han tocado más veces, como Iannone con Maverick, justo después de que le pasara Zarco por fuera, o el propio Márquez con Rossi.

Mientras todo esto ocurría, por detrás se esforzaba Dovizioso por recuperar posiciones. Partía undécimo en la parrilla y se ponía vigésimo en la segunda vuelta al colarse en el final de recta cuando iba undécimo. Su remontada le ha llevado hasta ocupar de nuevo esa posición desde la que salía, pero la ha perdido en la recta de meta al superarle Redding y Pedrosa, de nuevo desaparecido todo el fin de semana, pero que le ha quitado un puntito al final al rival de su compañero en la pelea por el título.

Volviendo al grupo de cabeza, decir que Márquez se ha girado varias veces hacia atrás para controlar la situación y que, de una manera parecida a la que ya dominara en Aragón, se ha deshecho de la competencia cuándo y cómo ha querido. Sus miradas en las vueltas 10 y 12 rozaron el descaro, porque dejaba intuir que iba sobrado y reconoció después que estaba buscando a Dovi. Así, no sorprendió que a siete vueltas del final, en la 21, superara a Maverick con un preciso interior en la curva 4 y de ahí a meta ya no le tosiera nadie.

El del Repsol Honda ha quedado ajeno a la preciosa batalla que ha habido tras él por las otras dos plazas de podio. Rossi, que ha hecho un carrerón, ha contenido a sus perseguidores cerrando con maestría la puerta en la última vuelta. Y Maverick, que se ha rehecho del toque con Iannone que le ha relegado al séptimo puesto, ha podido con Zarco en la meta gracias al rebufo por 16 milésimas, quedándose a 27 de su compañero en el box oficial Yamaha.

Detrás de los cuatro primeros han acabado finalmente algo cortados Crutchlow, Iannone, Miller y Rins. Más atrás, Pol, noveno con la KTM y ganándole la batalla a su compañero de equipo mientras sufría problemas de electrónica, y Pedrosa 12º, Lorenzo 15º, Rabat 16º, Bautista 17º y Barberá 20º.