Sainz: “No sería mérito mío si acabo delante de Fernando”

Se le ve con una gorra en el circuito de Barcelona, cronómetro en mano, mientras Fernando Alonso pasa con su Renault volando en unos entrenamientos. Carlos Sainz era un niño cuando soñaba con estar al lado de su ídolo en un gran premio de Fórmula 1. Ahora lo ha conseguido y el comienzo del madrileño de 20 años está siendo mejor que el del asturiano. Carlos con un Toro Rosso muy bien diseñado, Fernando con un McLaren que apenas tiene motor. Y en una F-1 con otro amigo, Roberto Merhi, y con su padre por el paddock, el gran Sainz, el Sainz grande. Matador55 nos cuenta este fantástico inicio de Mundial y más cosas.

—En Australia logró su sueño, lo que había querido hacer toda la vida. Debutar en F-1... y de qué manera.

—En realidad fue muy bonito, pero todo se puede resumir en que a partir de ahí tenemos que crecer. Tanto del GP de Australia como del de Malaisia solo queda aprender, sacar las conclusiones positivas y lo que se puede mejorar. Y asimilarlo para ser mejor piloto.

—En el GP de Malaisia, además, estuvo al fin compitiendo en la pista junto a Fernando Alonso y también con Roberto Merhi, su ídolo de siempre y el que fue su rival por el título de las World Series el pasado año.

—Fue algo especial, primero con Fernando, que sigue siendo el mejor y espero que pronto pueda poner las cosas en su sitio como dije en Twitter, y con Roberto me llevo ahora muy bien y compartimos muchas cosas. Cuantos más españoles seamos mejor y espero que podamos estar mucho tiempo aquí.

—Hablando de Fernando, en la redacción de AS donde tiene grandes amigos, hay apuestas y hay quien piensa que usted acabará el año por delante de Alonso…

—Bueno, eso es mucho decir, pero si eso llegara a suceder no tendrá nada que ver con el talento de uno y otro, ni conmigo haciendo un buen año, será porque McLaren Honda no habrá hecho bien sus deberes y en cambio Toro Rosso sí los suyos, pero no sería por mérito mío.

—Ahora que tantos aprovechan para criticar al bicampeón asturiano, a usted le es imposible tener nunca una mala palabra para Alonso.

—Es imposible, imagine lo que es estar aquí junto a Fernando, que siempre ha sido mi referente, mi ídolo. Si él no hubiese llegado a la F-1, yo no me habría creado el sueño por el que estoy aquí.

—Además de Fernando, díganos tres personas sin las que no estaría aquí ahora mismo.

—Sin mi padre y mi familia, en general, hubiese sido imposible, sinceramente. Y sin Helmut Marko y Red Bull este sueño tampoco estaría sucediendo y, sí, claro, por último tengo que incluir a Alonso, él ha sido la clave.

—Teniendo un padre bicampeón del mundo de rallys, ¿cómo le dijo que quería ser piloto de Fórmula 1?

—No fue de repente, se fue dando cuenta él mismo poco a poco. Resultó un proceso muy natural, empezamos a ir a los karts, me veía el interés por no perderme una carrera de F-1, le empecé a pedir que fuésemos más en serio... y así él, poco a poco, se fue dando cuenta de que era mi sueño y que tenía claro el lugar donde pretendía llegar.

—Además de rallys, su padre es también campeón del Dakar. ¿Se atrevería usted a participar en alguna edición o correr un Rally de Argentina?

—Sí, podría decir que está en mi lista de aventuras. Ojalá sea dentro de veinte años o así cuanto ya tenga una buena trayectoria en Fórmula 1, y me pueda retirar y empezar esa aventura.

—Terminamos con un reto entre los Sainz. Si vamos un día al kárting de Las Rozas, ¿quién ganaría en un duelo padre-hijo a una carrera de cinco vueltas?

—Creo que yo.

—No sé, no sé…

—Sí, creo que yo porque estoy más acostumbrado.

—Pues un día quedamos y lo comprobamos.

—Hecho.

—Así sea.