Hamilton se queda sin frenos en su debut con el Mercedes

Lewis Hamilton estrenaba el Mercedes. Estaba como ganas el británico, era su debut con el coche con el que pretende recuperar el relumbrón perdido en su última época de McLaren, el equipo de toda su vida que decidió abandonar al finalizar 2012. Expectación en el circuito de Jerez y Hamilton rodando cada vuelta más y más rápido, hasta llegar a ocupar la segunda posición en la tabla provisional de tiempos.

Pero el entusiasmo duró poco. Cuando llevaba completadas quince vueltas, el Mercedes no se detuvo en la frenada de la recta posterior del circuito, a la entrada de la curva Dry Sack. Hamilton bloqueó las ruedas y su trayectoria continuó siendo recta, por lo que se adentró en la escapatoria de grava hasta detenerse contra las barreras de protección.

El piloto salió ileso y sin problemas del coche, que aparentemente tampoco sufría daños graves, y también algo desconcertado con lo ocurrido. Más adelante, Mercedes confirmó que se había tratado de un fallo en el sistema de frenos del W04, que impidió a Hamilton realizar la detención con normalidad como cada una de las vueltas anteriores. Un debut accidentado, por tanto, el del británico con su nueva escudería, aunque también prometedor hasta ese instante a la vista de sus registros. Eso sí, parece que la fiabilidad continúa siendo el punto flaco del monoplaza alemán, considerando los problemas que también sufrió Rosberg el primer día de test en la pista andaluza.