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Killer is Dead

Killer is Dead

Killer is Dead, guía completa - El Gigante que robó un planeta

Ayuda a Mondo Zappa a completar todos los encargos de asesinato, domina sus poderes y encuentra todas las Scarletts escondidas con nuestra guía.

EL GIGANTE QUE ROBÓ UN PLANETA

Viajamos al área 151 donde, supuestamente, hay recluido un alienígena. En cuanto entres en la instalación te harán frente dos guerreros. No supondrían un problema de no ser por los tiradores que disparan desde la plataforma. Permanece en guardia y ocúpate primero de los guerreros mediante la técnica de esquivar. Una vez derrotados, ya puedes encargarte de los tiradores disparando.

Avanza varias salas deshaciéndote de los enemigos y llegarás a una escalera con una torreta encima. Corre para matar al artillero y luego toma la ametralladora. Dispara al soldado que aparece en la puerta al otro lado y luego dispara a los bidones.

Sigue el camino hasta encontrar al siguiente grupo de enemigos. Esta vez te enfrentarás a un tirador comandante, así que aléjate de su zona de tiro y elimina a los guerreros del suelo. Después asómate y mata al tirador, siempre con cuidado de esquivar sus disparos. Avanza un poco más y deshazte de los tres samuráis mecánicos enfrentándote a ellos por separado -recuerda usar el puñetazo para romper su guardia-.

Toma el ascensor y prepárate para un tramo frenético. Debes llegar al final antes de que termine la cuenta atrás. Tendrás que ir cruzando salas con varios combates. Intenta llenar el medidor de rosas y mata siempre al enemigo más poderoso con la ejecución. Utiliza a los débiles para recargar el medidor de rosas y vuelve a utilizar la ejecución.

El punto crítico es el final, donde tienes que derrotar a una bestia pesada mientras otras dos te persiguen por el suelo y dos tiradores te disparan desde lo alto. Tu objetivo es eliminar a la bestia blindada, olvídate del resto. Lleva el combate a la pred de los tiradores, pégate a la puerta mientras esquivas las embestidas y balas enemigos, y centra tus golpes en la blindada. Usa una lluvia de puñetazos para dejarlo aturdido y esquiva cuando las otras dos rueden, con suerte dañarán al objetivo.

Cruza el tejado
Superada la cuenta atrás, toma el ascensor y acaba con todos los demonios que aparezcan. Este es un buen lugar para ver hasta dónde puedes llegar subiendo el medidor de combo. La zona se llenará de enemigos, relativamente débiles. Esquiva, golpea y luego muévete entre ellos como un huracán morado.

Una vez arriba, saldrá a recibirte un comandate apoyado por un tirador. Este segundo es el más problemático, permanece en guardia y mata primero al guerrero esquivando y contraatacando. Luego dispara al tirador y esquiva cuando veas el rayo rojo. Toma la cabeza para cruzar la pasarela y permanece en guardia mientras tu compañeras se encarga de los guerreros.

Ya sólo te queda abrirte paso hasta el tejado. En el primer tramo, elimina rápido a los drones y luego ocúpate del resto luchando en la parte baja de las escaleras. Con la zona despejada, corre subiendo por la rampa y entra en el edificio. Deshazte de la bestia y sigue tu camino.

Terminarás llegando a la azotea del edificio, donde el gigante te espera soltando rayos por los ojos. Protégete detrás de las columnas y dispara a los drones antes de avanzar. Cuando el gigante suelte su rayo, corre y rodea la zona. Si ves que va a lanzar otro rayo, quédate pegado a una columna por la parte posterior. Rodea toda la zona y sube por la rampa que hay a la izquierda, justo debajo de su cabeza. Deshazte de la última bestia y prepárate para luchar contra el coloso.

Jefe final
Para acabar con este gigantesco jefe tienes que destruir los cristales de su cuerpo. Dispara sobre ellos hasta que salte la sangre y verás que disminuye su barra de vida. Cada vez que destruyes uno recibes orbes que rellenan tu medidor de rosas. Sino, puedes matar a uno de los guerreros que aparecen periódicamente en la azotea.

El gigante tratará de destruirte lanzando escombros, estudia bien su trayectoria para esquivarlos. El más peligroso es la roca gigante, que ocupa casi toda la azotea. Fíjate en la sombra y corre hacia la esquina opuesta para salvarte. Otro de sus ataques favorito es aplastarte con la mano. Si consigues realizar el bloqueo justo en el último momento, su brazo saldrá rebotado haciendo girar al monstruo, lo que te da acceso a los cristales de su espalda.

Repite la operación varias veces, esquivando los rayos en la última parte del combate sólo con pegarte hacia él. Destruye los cristales 3 veces y habrás acabado con él.