Wolfenstein
Wolfenstein, guía completa - II Excavación
Desbarata los planes del régimen nazi.
Nos aparece Erik y seguimos sus instrucciones. Este es un buen momento para echar un vistazo por la zona y hablar con los personajes que nos aparecen. Estamos en el Mercado Negro y Aton y Stefan Kriege nos ofrecerán todo tipo de cosas y en la tienda de armas podremos hacer mejoras. No es aconsejable gastar dinero en munición pues más adelante lo haremos gratis.
Cuando hayamos acabado en el mercado, Erik nos emplazará a encontrar una base de la resistencia. Una vez allí buscamos a Caroline y nos dice que nuestro objetivo es una excavación pero antes tenemos que encontrar a un conductor y un camión.
Erik nos guiará hasta el camión pero enseguida tendremos que luchar de nuevo. Ahora nos podremos hacer con la munición que los nazis suelten. Seguimos nuestro camino y Erik se parará par indicarnos que hay nazis cerca. Miramos hacia abajo, por el túnel que hay cerca, y matamos a dos soldados. Se da la alarma y en este momento seremos atacados duramente por bastantes enemigos. Es fundamental parapetarnos y elegir muy bien el orden de nuestros objetivos. Erik nos ayudará pero no es muy eficaz con su arma.
Nuestro destino ahora es una casa ocupada a la que llegaremos a través de una enorme puerta de madera. Erik nos guiará. Cuidado con la casa pues hay enemigos tanto en la primera como en la segunda planta. Además, sus armas son poderosas.
Por fin llegamos al camión. Conocemos a un arqueólogo que nos habla de la excavación y de la importancia de conseguir cierto medallón. Apareceremos entonces en la excavación, dentro de una tienda donde encontraremos nuestro primer montón de oro. Fuera de la tienda hay un nazi despistado. Tras acabar con él, entramos en otra tienda vacía donde hay otros dos montones de oro; tenemos que buscarlos entre las camas.
Salimos también de esta tienda y nos dirigimos a la entrada de la excavación. Antes de entrar nos batiremos con más enemigos y podremos conseguir el primer archivo de la misión.
Una vez dentro avanzaremos por un pasillo. En la pared de la izquierda hay otro archivo. Seguimos adelante y comenzamos a oír unas extrañas voces. Doblamos una esquina y nos encontramos con unos sacerdotes hablando en latín frente a unos nazis. Acabamos con todos ellos, no es difícil. Ahora activamos el altar central y nos hacemos con el medallón. Cuando se lo devolvamos al arqueólogo, éste lo combinará con otro aparato que potenciará nuestras habilidades.
Se trata del Veil, con el que podremos ver cosas que antes pasábamos por alto. Ahora podremos seguir por un pasillo oculto que nos llevará a una sala donde recargaremos la fuerza del Veil para luego seguir por otra puerta. Aquí lucharemos con nuevos enemigos y podremos conseguir otro archivo y otro montón de oro. Todo con el uso del Veil, por supuesto.
Llegamos hasta la otra parte de la sala en la que estamos y encontramos un túnel obstruido. Con el Veil descubrimos una puerta oculta. Por allí seguimos hasta un pequeño altar donde encontraremos el primer Tomo de Poder del juego.
Volviendo a la sala anterior, encontramos dos montones de oro, uno cerca de unas tablas al lado de la puerta oculta y otro subiendo por unas plataformas cercanas a la misma puerta. Ahora tenemos que cruzar un puente hasta llegar a una catarata. Justo debajo hay un corredor.
Antes de cruzarlo, también podemos subir el andamio que nos encontraremos. En lo más alto encontraremos otro montón de oro. De vuelta en el corredor, llegamos al final y a la derecha cogemos una puerta. En esta nueva sala se celebran más ceremonias con varios enemigos. Cuidado con el sacerdote. Tras la lucha, podemos recoger el archivo que está en una mesa a la izquierda de la sala, un montón de oro en el suelo y otro en un cajón roto a la derecha. Ahora subimos por las escaleras y llegamos hasta un altar. El Veil nos revelará una puerta oculta.
Gracias al altar seremos recompensados con un nuevo poder cuando utilicemos el Veil: el Mire. Nos sirve básicamente para ralentizar el tiempo. Pronto lo tendremos que usar, justo cuando lleguemos a unos puzzles. Son muy simples.
De vuelto a nuestro camino principal, llegaremos a una estancia donde un puente cortado parece infranqueable. Eso era antes, porque ahora con el Mire no es un obstáculo. Una vez en el otro lado, veremos a la izquierda un archivo. Más adelante, una pequeña escalera nos lleva a un pilar horizontal en llamas. Entonces tenemos que ir a la derecha, a una sala circular. Allí hay una puerta que crece a medida que nos acercamos se cierra. La clave está en usar de nuevo la Mire.
En el otro lado nos esperan varios nazis que custodian una especie de dispositivo. Lo destruimos usando dinamita. Es hora marcharnos, pero la vuelta no es un camino de rosas. Volvemos sobre nuestros pasos pero no son pocos los nazis que intentan matarnos. Al llegar a un bidón rojo encontraremos el último montón de oro.
Una vez fuera de la excavación, otro contingente nos espera. Es bastante numeroso pero podemos (y es muy recomendable) usar una ametralladora situada cerca del ascensor.