Lobezno X-Men: Los Orígenes, guía completa - Bolivar Trask

Avanza eliminando todo tipo de enemigos hasta encontrar un panel que controla los movimientos de un transportador; muévelo hasta la otra punta e introdúcete en el que se encuentra al lado del panel. Saca la batería e introdúcelo en el hueco de la habitación contigua. Vuelve a la sala superior y mueve el transportador hasta que quede cerca de la máquina congeladora; actívala y corre hacia abajo para congelarte y poder pasar.

Al otro lado te espera el Prototipo nº1. Tiene en su haber toda una gama de ataques peligros: ráfaga de misiles, rayo congelante… Incluso de tanto en cuando aparecerán pequeños robots con ganas de molestar. En esta ocasión, lo mejor es atacar directamente -es complicado embestirle y tampoco se le quita mucho daño- e ir esquivando cada vez que vayamos a recibir un guantazo. Cuando tengas la mano de Trask, vuelve sobre tus pasos -eliminando a todos los enemigos que salgan a tu paso- para introducirla en el panel correspondiente.

No obstante, hay que coger una ruta alternativa. Cuando llegues a la zona de los diversos transportadores rojos, sube por el ascensor, vence a la unidad Ghost, haz malabarismos por el estrecho camino y baja por un nuevo ascensor. En esta planta primero debes encargarte de los soldados y luego activa los controles del puente; corre por él hasta que puedas embestir al distante enemigo -sé rápido, pues la pasarela empezará a desaparecer-. Descuartiza a los esbirros, toma un nuevo ascensor y ¡ahora sí! utiliza la mano para poder avanzar.