NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

DEPORTE EN RUSIA

Borrados por Putin

El deporte ruso cae golpeado por la desconexión en represalia a su ataque contra Ucrania. Afectados los deportistas y también como escenario de grandes citas.

Actualizado a
Borrados por Putin

Allí se coronó Francia de nuevo, también fue la última vez del Manchester United dominando Europa y años atrás vio triunfar por última vez al Parma en la vieja Copa de la UEFA, además de dar unos Juegos de Invierno en el que ellos dominaron el medallero. El destino no es otro que Rusia, país de rabiosa actualidad tras la invasión ordenada por Vladimir Putin, presidente de la Federación Rusa, iniciando un conflicto armado con Ucrania.

Las sanciones por parte de la Unión Europea y de Estados Unidos se acumulan, pero el mundo del deporte también ha ejercido su poder sacando a Rusia y, en menor medida a Bielorrusia, del foco sabedores del peso y la influencia que este tiene a nivel mundial como propaganda de lo más positiva. Ningún régimen renunció a uso como fenómeno popular desde que entendieron su poder. Porque el deporte es política, en tanto en cuanto afecta a la polis. Porque existe la política en el deporte, el deporte como factor político y el uso político de este.

Uno que se aplica en este conflicto, como decíamos, sacando a Rusia del foco, pero los hechos recientes evolucionaban en una vía muy distinta. Rusia se convertía en un epicentro del deporte mundial, no sin polémica, hasta ahora. Aunque recibían acusaciones de usar el deporte como propaganda para 'tapar' problemas y presentarse de forma amable al mundo ('sportswashing'), así han afectado las decisiones militares de Vladimir Putin al deporte ruso.

Fútbol: sede del Mundial, finales de Champions y los superequipos que no fueron

Desde la final de Moscú en 2008, que coronó a Cristiano Ronaldo por primera vez campeón de Europa ante el Chelsea de Abramovich, hasta ser la sede del Mundial de 2018 en el que Mbappé se presentó al mundo como la siguiente gran estrella. El fútbol es un deporte de amplio seguimiento en Rusia y su crecimiento ha sido exponencial en los últimos años tanto a nivel competitivo como presentándose como gran escenario para los mejores torneos del mundo.

Aquí entran dos nombres clave, Vladimir Putin y Gazprom. El primero se encargó casi personalmente de que el Mundial de Rusia fuera todo un éxito. Este nació bajo la sospecha del soborno, denunciado por la Federación Inglesa, y se hizo a todo lujo. Se levantaron cuatro estadios de cero (Samara Arena, Estadio Nizhni Novgorod, Estadio Kaliningrado, Rostov Arena) y se reformaron varios incluyendo el Luzhniki, la joya de la corona que albergó la final en Moscú con capacidad para 80.000 espectadores. A estas obras se le sumó la construcción de hoteles, aeropuertos y líneas de tren que elevó el presupuesto mundialista hasta los 352.500 millones de rublos.

Esta gran competición fue la cumbre de un plan que comenzó con el intento de meter a Rusia entre las grandes ligas europeas. Hace varios años atrás hubo un notable aumento de la inversión que buscó atraer grandes estrellas como más tarde intentaría China o ahora hacen desde el Golfo Pérsico. El Zenit, con Gazprom detrás, ganó la Europa League y se mantiene en una zona media europea aunque la atracción de las principales estrellas ya no es lo que era. El proyecto de gran escenario quedó en un intento a medias.

El exponente de ese intento fallido fue el Anzhi Majachkala. El multimillonario Suleiman Kerimov adquirió el club en 2011 en un intento de colocarlo como uno de los grandes exponentes del fútbol del país. Con sueldos atractivos y en busca de levantar una liga de gran entidad, este empresario del petroleo y el gas atrajo todos los focos del fútbol mundial al contratar a Roberto Carlos, Samuel Eto'o y Guss Hiddink. El proyecto no llegó a buen puerto y apenas duró un lustro. Se realizó una venta masiva de jugadores (Willian y Eto'o al Chelsea, Lass Diarra al Lokomotiv, etc) y el club acabó cambiando de manos.

El caso del éxito del Zenit, campeón de la Europa League, está marcado por Gazprom, la empresa de gas que es su accionista mayoritaria. Además del éxito deportivo en su propio club, esta empresa entró con fuerza en el fútbol a nivel de instituciones siendo patrocinador oficial de la Champions League a partir de la 12-13 y de la FIFA a finales de 2014. El inicio del conflicto ha obligado a romper el contrato a nivel europeo del que ha sido uno de sus más importantes actores empresariales en los últimos tiempos.

Eto'o durante su etapa en el Anzhi.
Ampliar
Eto'o durante su etapa en el Anzhi.AFP

Desaparecerá su marca y antes lo hizo su equipo a manos del Real Betis, pero UEFA tomó la determinación de igual manera de obligar a marcharse al Spartak de Moscú a nivel de clubes de la Europa League. FIFA también borró del mapa a Rusia excluyendo a la última anfitriona del Mundial de Qatar. Además, la confederación europea también excluyó a su selección femenina de la Eurocopa de Inglaterra y les arrebató su próxima gran cita: la final de la Champions League de esta campaña en San Petersburgo. De gran escenario a ser echados de la fiesta.

Fútbol fuera de sus fronteras: el Chelsea y el Mónaco, vía parecida y distintos problemas

El Chelsea y el Mónaco son junto al Vitesse y el Everton los principales clubes de propiedad rusa fuera de sus fronteras. El Chelsea es, sin duda, el gran reclamo y el más afectado, aunque los de Liverpool decidieron suspender este lunes sus patrocinios con sus socios rusos incluyendo a USM, de Alisher Usmanov. Este ha visto sus activos congelados por la UE y como el club toffee cancelaba sus acuerdos que incluía las instalaciones y los naming rights del nuevo estadio.

La entrada de Roman Abramovich fue un rescate a este club londinense a base de su fortuna personal generada en la última etapa de la URSS y 'aprovechando' sus últimos coletazos. Este creció con movimientos 'extraoficiales' y se dedicó a la liquidación de compañías en los 90, donde empezó a amasar su fortuna hasta alzarse entre los más ricos gracias al negocio del petróleo. Fue a partir de esos movimientos donde también ganó cierta influencia política hasta llegar a ser invitado a vivir por Boris Yeltsin en el Kremlin. Su relación se mantuvo con la llegada de Putin llegando este a renovarle su mandato como gobernador de Chukotka, cargo que abandonó en 2008.

Roman Abramovich durante un encuentroe entre el Chelsea y el Sunderland en 2017 en Stamford Bridge.
Ampliar
Roman Abramovich durante un encuentroe entre el Chelsea y el Sunderland en 2017 en Stamford Bridge.BEN STANSALLAFP

Entre su entrada en política ya como un gran magnate decidió comprarse el Chelsea para hacer de él un gigante del fútbol europeo. A base de inversión y millones, logró su objetivo en el club del barrio más elitista de Londres. Conformando superplantillas con estrellas rutilantes también en los banquillos, el Chelsea logró dominar Inglaterra, Europa con dos Champions y una Europa League conquistadas y, recientemente, se alzó como campeón mundial.

Obligado a residir en Reino Unido con otro pasaporte (tiene nacionalidad israelí y también portuguesa), el inicio de la guerra en Ucrania le marcó como uno de los hombres cercanos a Vladimir Putin y este decidió abandonar la presidencia del club para dejarlo en manos de la fundación del club. Este martes, en un comunicado firmado por el propietario y publicado en la web del Chelsea, confirmaba la decisión de poner a la venta el club. "Siempre he tomado las decisiones pensando en el interés del club. En esta situación, la mejor decisión es vender el club pensando en los intereses de este, los aficionados y los patrocinadores", aseguró. Roman Abramovich aseguró que ni se quiere deshacer del club por la vía rápida ni tratar de enriquecerse con la venta creando con los fondos que reciba por esta una fundación en beneficio de las víctimas de la guerra de Ucrania. "Estos ingresos se destinaran a las necesidades urgentes e inmediatas de la víctimas de la guerra adem´sa de apoyar el proceso de recuperación en el largo plazo". Según la consultora KPMG, el club del Bridge está valorado en 1.900 millones de euros.

De ser así se podría dar la salida del club una de las mujeres más importantes en el mundo del fútbol: Marina Granovskaia. 'Nacida' empresarialmente en la petrolera de Abramovich, Granovskaia pasó a ser la mano del rey gestinonando el día a día del club londinense. Esta se hizo conocida por su mano dura en las negociaciones de, entre otros, Thibaut Courtois o Eden Hazard.

Desde el Principado de Mónaco, el también ruso Dmitri Rybolovlev trató de construir un gran club que le hiciera frente al Paris Saint-Germain de la propiedad qatarí. Con el equipo rozando el descenso de la Segunda División, este relanzó al conjunto a base de fichajes notables hasta alcanzar su pico con el equipo que acabó campeón en la 16/17 con Kylian Mbappé como gran aparición.

El fichaje de Radamel Falcao desde el Atlético de Madrid fue su gran movimiento sumado a los de James, Bernardo Silva, Moutinho, Fabinho... Su situación personal con un divorcio que tocó su fortuna complicó el proyecto del club pasando de aspirante a derrocar a los parisinos a un club formador y vendedor. Sirva Mbappé como muestra.

El ruso, por el momento, parece poco afectado por el conflicto en lo que a su negocio en el Mónaco se refiere. A nivel de jugadores rusos, Smolov ha sido el principal ruso en pronunciarse contra la guerra además del gesto protagonizado entre el ucraniano Malinovski y el ruso Miranchuk en su último encuentro con la Atalanta.

Baloncesto: adiós a un gigante y a dos importantes patrocinios

El inicio del conflicto pilló a la Euroliga en plena fase regular de la competición. La entidad privada y máximo torneo del baloncesto europeo ha perdido, en este sentido, escuadras que pesan más en la canasta que sobre el verde después de decretar su salida de la competición.

La salida de CSKA, Zenit de San Petersburgo y Unics Kazan es la de un propietario, uno de los socios más covenientes y uno que venía a reforzar la zona media. El caso de los moscovitas supone la marcha de uno de los clubes propietarios pero, políticamente, afecta tanto como la marcha del Zenit, al que interesó tener cerca dado el potencial económico de su propiedad. Este fue primero invitado y luego, consiguió la clasificación a posteriori por méritos deportivos a través de la VTB United League en la que participan nueve equipos rusos, uno polaco, uno estonio, uno bielorruso y otro kazajo.

Más que la competición cabe destacar el patrocino del banco ruso que esta comparte con la competición europea. Desde la organización se cortó relación la entidad bancaria. Esta salida de los clubes rusos ha derivado también un éxodo de jugadores de estos conjuntos al quedarse sin el escenario europeo.

Motor: sin foco para el 'Benidorm' ruso

El Gran Circo se ve afectado por el conflicto entre Rusia y Ucrania viéndose en la necesidad de cancelar una de sus citas en el calendario, el Gran Premio de Rusia celebrado en Sochi. Sochi, situada a orillas del Mar Negro, es uno de los principales reclamos turísticos de Rusia. Lejos de la imagen de nieve y estepa, este emplazamiento del Krai de Krasnodar es conocida por ser una ciudad-balneario, tiene un clima subtropical y goza de prestigio como destino vacacional desde la URSS cuando Stalin la eligió como uno de sus destinos favoritos para residir. De alta popularidad en el país, vendría a ser su 'Benidorm'.

El deporte sirvió como gran impulsor para abrir este destino vacacional de manera internacional desde 2014 recibiendo los Juegos de Invierno y también la ya citada carrera. Esta estuvo impulsada por la buena relación que mantienen Bernie Ecclestone, expresidente de la F1, y el premier ruso Vladimir Putin. "Como persona, le encontré muy directo y honorable. Vladimir hizo exactamente lo que dijo que iba a hacer sin ninguna discusión", aseguró en Times Radio hace días atrás defendiendo como injustificable la cancelación del propio gran premio para el que aún no se habla de sustitutos, pese a haber caído de manera definitiva ya que después de anunciar la baja de Sochi, el Mundial también ha comunicado que Rusia se queda sin hueco en el Gran Circo en las próximas temporadas.

Imagen de una de las primeras curvas del circuito de Sochi, integrado dentro de un resort con distintas instalaciones como el parque de atracciones. A la vista, publicidad de VTB, banco también patrocinador de la Euroliga.
Ampliar
Imagen de una de las primeras curvas del circuito de Sochi, integrado dentro de un resort con distintas instalaciones como el parque de atracciones. A la vista, publicidad de VTB, banco también patrocinador de la Euroliga.AFP

En lo que a equipos se refiere, el principal afectado es el norteamericano Haas. Su piloto, el ruso Nikita Mazepin, trajo a Urakali, empresa de su padre, con un notable patrocinio detrás para dar viabilidad económica a la escudería vistiendo incluso con la bandera rusa el coche. Ahora, con el inicio del conflicto, estos colores nacionales desaparecieron además del patrocinio de Urakali. Haas busca distintas vías de financiación. Las mismas que pusieron a Mazepin al volante, podrían apartarle. La FIA, como tal, no puso impedimento en que los pilotos rusos y bielorrusos siguieran compitiendo.

Boxeo y MMA: una excepción y campeones en el frente contra Rusia

Con Khabib como figura más popular en los últimos tiempos, el boxeo y las artes marciales mixtas son dos deportes donde los rusos han tenido campeones relevantes en los últimos tiempos. Precisamente el ya exluchador apareció en el UFC Vegas 49 celebrado en el estado de Nevada como 'maestro' del también ruso Islam Makhachev, una de las figuras actuales de la disciplina, que peleaba contra el estadounidense Bobby Green. Aunque no había una sanción expresa, ninguno decidió sacar la enseña de Rusia como sí sucedió con anterioridad a pesar de la victoria cerrada por KO técnico.

Vitali Kitschko, vestido con el uniforme del ejército ucraniano, mientras recarga su ametralladora ligera.
Ampliar
Vitali Kitschko, vestido con el uniforme del ejército ucraniano, mientras recarga su ametralladora ligera.

Las cuatro organizaciones que gestionan el boxeo mundial han decidido no sancionar peleas en territorio ruso desde el inicio del conflicto, pero las sanciones cuentan con una excepción para que se viva una de las peleas más esperadas.

La Asociación Mundual de Boxeo (WBA) fue una de las más duras en aplicar sanciones excluyendo a todos sus peleadores rusos (las otras tres aún no lo han hecho), pero manteniendo solo a uno: Dmitry Bivol. El actual campeón mundial del semipesado sigue con la licencia vigente para poder pelear contra Saúl Canelo Álcarez el próximo 7 de mayo en una sede aún sin definir. Donde no se dará seguro es en Rusia.

Si bien las principales figuras del deporte de contacto ruso no se han pronunciado, las ucranianas están directamente involucradas en el conflicto. Vitali, ahora alcalde de Kiev, y Wladimir Klitschko, ambos excampeones mundiales de boxeo, Vasyl Lomachenko (ex campeón mundial en tres divisiones y uno de los mejores de la actualidad), Olek Usyk (campeón en dos divisiones, actual campeón mundial WBA, WBO e IBF del peso pesado) y Yaroslav Amosov, campeón de Bellator del peso ligero, se encuentran encuadrados dentro del ejército ucraniano y en combate.

Más deporte: menos problemas para el tenis, conflictos con el COI y sin Juegos Paralímpicos

Después de aparecer bajo la bandera su comité olímpico y no como Rusia en las dos últimas citas olímpicas debido a las sanciones aplicadas y ratificadas por el TAS a causa de la trama de dopaje estatal, los problemas a nivel olímpico para Rusia se acumulan. Este caso supuso un importante golpe al deporte ruso con dimisiones en bloque, multitud de casos positivos y una trama organizada desde las más altas instancias para llegar a la cumbre a nivel deportivo.

Las sanciones por el inicio de la guerra en Ucrania no permitirían, a día de hoy, participar a los atletas rusos en muchísimas disciplinas de los Juegos Olímpicos aunque los y las atletas hubieran conseguido su mínima olímpica y demostraran estar límpios en un test antidopaje. Así está sucediendo ya de cara al próximo Mundial de atletismo en pista cubierta que se celebrará en Belgrado del 18 al 20 de marzo. El COI tomó como una recomendación de no invitación a deportistas rusos y bielorrusos como postura oficial además de retirar a ambos países como sedes en la medida de lo posible.

Una de las grandes competiciones que más rotunda se ha mostrado contra Rusia y Bielorrusia han sido los Juegos Paralímpicos de Invierno de Pekín 2022 (4-13 marzo). Pese a que el miércoles 2 el Comité Paralímpico Internacional (IPC) anunció que dejaría competir a los deportistas de Rusia y Bielorrusia como neutrales, este jueves 3 de marzo el organismo cambió repentinamente de opinión ante la amenaza de otros países de no competir y decidió excluir a los atletas de Rusia y Bielorrusia de los Juegos Paralímpicos de Invierno, en una decisión que Moscú ya ha calificado de "monstruosa" y "vergüenza".

El caso del rugby es uno de los que más de cerca afecta a España. La selección rusa y la bielorrusa fueron apartadas de las competiciones por parte de la Federación Internacional dejando en vilo la clasificación para el Mundial de Francia del próximo año, para el que los leones están bien posicionados en el clasificatorio. Uno que está por resolver y que dependerá de World Rugby. Según pudo saber AS, que sea la organización mundial la que lleve la voz cantante gusta en la Federación Española, que sigue a la espera de noticias.

Uno de los deportes menos afectados en este caso es el tenis. De momento, el veto a los deportistas rusos se aplica a las competiciones nacionales quedando excluidos de la Copa Davis y la Copa Billy Jean King aunque pueden participar en los torneos tanto individuales como de dobles de la ATP y la WTA. Casualmente, este lunes, cuando pasaban pocos días del inicio de las hostilidades en Ucrania, el tenista ruso Danill Medvedev aparecía por primera vez en su carrera como número 1 del mundo. Un logro empañado por la sombra de la guerra.