La 'cara b' de los cortes de peso
Las bajadas drásticas de peso en deportes de contacto pueden ser contraproducentes a corto y medio plazo. Sufre el cuerpo, pero también la mente.
El Julija Stoliarenko trascendió su deporte hace unos días cuando se mareó estando sobre la báscula. El corte de peso es un tema muy importante en los deportes de contacto. Cuando más pueda reducir su masa corporal el deportista, mayor podrá ser su ventaja cuando esté en acción. Eso provoca que a veces se sobrepasen límites. El mareo de Stoliarenko es solo un ejemplo. Un corte agresivo puede afectar al rendimiento, pero no es lo único. Hay otros factores peligrosos detrás de estas prácticas si no se hacen con responsabilidad. Para conocer esa 'cara b' AS ha hablado con el psicólogo deportivo José García Donate y con el psicólogo experto en Trastornos alimentarios Robin Rica, quienes prestan sus servicios en la clínica Centta de Madrid.
"Cualquier corte de peso supone someter a estrés importante al cuerpo. Alteramos muchas conductas y cuando lo haces de manera muy brusca con este fin es peligroso. Se pierde líquido y puede desequilibrar los electrolitos, que hace que el corazón tengan un funcionamiento correcto. El riesgo de problemas cardiacos si se hace mal es alto", reconoce Robin Rica. Ese es el efecto más conocido, pero esas prácticas pueden generar más cosas. "Un deportista de estas disciplinas es población de riesgo. Si alguien nos dice que va a bajar diez kilos en una semana nos asustamos, pero en este contexto se entiende y el riesgo por ello es mayor", añade.
El plano mental es en el que menos se piensa, pero es igualmente importante a la hora de estas prácticas. "El concepto mas importante es el de la identidad deportiva. Es decir, lo arraigado que tenga la persona su rol de deportista. En estos deportes se piensa que se está bien cerca de la pelea, que es con un peso mas bajo de lo habitual. Por ello, cuando hay un periodo sin competir te ves fuera de ese rol. Cuando asocias un rendimiento a un peso puede aparecer la frustración y culpabilidad, lo que puede generar trastornos en la alimentación porque quieres lograr lo que te cuesta un esfuerzo de un modo más rápido", avisa José García Donate, quien también apunta a una figura clave: el entrenador. "El papel del entrenador como agente de salud es fundamental en estos casos, ya que para el deportista es una figura de referencia fundamental, una especie de figura paterna/materna. Acompañar a los deportistas velando por su salud física y mental, trabajando con otros profesionales (nutricionistas, médicos deportivos, psicólogos, etc.) o derivando ante las primeras señales de alarma de que un deportista se esta poniendo en riesgo", añade el psicólogo deportivo.
Tanto García Donate como Rica avisan: "A pesar de que sea una práctica extendida en los deportes de combate, el corte de peso es una práctica extrema que no es inocua tanto física como psicológicamente. Llevar a nuestros deportistas a ese tipo de conductas nos debería llevar a reflexionar sobre cuáles son nuestras prioridades al poner por encima de la salud un supuesto rendimiento. Resulta paradójico que cuánto mas nos acercamos a la élite deportiva, donde podríamos pensar que los deportistas están mas supervisados médica, nutricional y psicológicamente, es precisamente el contexto donde mas conducta extremas se observan. Nunca hay que olvidar que antes del rendimiento de un deportista se encuentra la salud de la persona". Es difícil que una práctica como el corte de peso, tan arraigada, se cambie, pero la manera de afrontarlo puede ser clave en la salud futura de los deportistas. Stoliarenko, el último ejemplo.