Smith y Teixeira toman el relevo de la UFC en Jacksonville
Anthony Smith y Glover Teixeira se enfrentan este miércoles en el combate estelar de la segunda de las tres veladas que organiza la UFC en Jacksonville.
Los ecos del UFC 249 continúan resonando. El regreso de la compañía fue un éxito en cuanto a expectación creada y como suele ocurrir con los grandes eventos, su resaca dura varios días. En esta ocasión no será tan larga, ya que los aficionados y la empresa ya miran a la siguiente fecha que tienen marcada en el calendario. Será este miércoles, de nuevo en el VyStar Veterans Memorial Arena de Jacksonville (Florida). La UFC se ha instalado allí durante una semana y quiere que sus tres shows sea lo más comentado de esos días.
El Ferguson vs Gaethje fue una batalla tremenda y el UFC 249 un evento de muchos quilates. Es un PPV, y lo que viene esta semana son dos UFC Fight Nigths. Habrá calidad, pero no será lo mismo. para el show, la UFC ha querido recolocar el combate que iba a estelarizar el UFC Omaha (25 de abril). Anthony Smith y Glover Teixera se cruzan a cinco asaltos. Es una pelea atractiva, pese a que no parece que la victoria de a ninguno una oportunidad titular en el corto plazo. Jon Jones parece que mira a la revancha contra Dominick Reyes.
A Jacksonville, Smith llega en el tercer lugar del ranking del semipesado tras ganar a Gustafsson en Estocolmo hace casi un año (1 de junio). Antes, había perdido contra Jones por el título, por lo que esa oportunidad no parece inminente. Por su parte, Teixeira es el número 8 de esa clasificación. Se encuentra con tres victorias consecutivas, pero ante rivales que no están en los primeros cinco primeros puestos. Es decir, si gana a Smith vuelve a ponerse a tiro de piedra de Jones. Pese a la buena dinámica, no es favorito.
Smith está en un buen momento (el mayor punto de Teixeira parece que ya pasó). De sus últimas ocho victorias todas llegaron antes del límite. Tiene pegada y también buen suelo, al igual que Teixeira. El brasileño sabe que no tiene nada que perder. Un tropiezo, con 40 años, puede ser su adiós a los grandes carteleras. Tendrá que intentar encontrar si la debilidad de la mandíbula de Smith es real o si como demostró ante Jones, también la ha mejorado. Es su oportunidad de brillar y reclamar. Todos los ojos están en Jacksonville.