Jon Jones se salva 'in extremis' ante Reyes en el UFC 247
Jon Jones retuvo el Campeonato de la UFC del semipesado ante Dominick Reyes en una decisión polémica en el estelar del UFC 247. Shevchenko se exhibió.
Jon Jones y Dominick Reyes se quedaron hablando sobre el octágono mientras el público se marchaba contrariado del Toyota Center de Houston. El primero, campeón del semipesado, había mantenido su cinturón ante el segundo en quizá la pelea más difícil que se le recuerda. Los jueces dieron vencedor a Jones por decisión unánime (48-47, 48-47 y 49-46) y discutida por el público, que abucheó el veredicto. La pelea fue cerrada y los fans vieron otra cosa. También Reyes: "Creo que gané del uno al tres. Los dos últimos fueron suyos, pero los anteriores no", se quejó amargamente. Tenía la receta para derrotar al invencible 'Bones', pero ser el poseedor del título fue determinante. Seguro que no de la manera que esperaba, pero Jones entraba en la historia. Con 14 es el peleador con más triunfos en peleas por el título (St-Pierre se queda con 13). Uno de sus mayores logros el día de su peor desempeño.
Reyes dejó claro desde el principio que no había ido a Houston de paseo. Estudió al milímetro a Jones y supo pelearle. Lo sorprendió de inicio con una izquierda recta que el campeón no esperaba. Bones es un luchador diésel y se quería tomar su tiempo para estudiar el pleito. No le dejó el aspirante. Presión alta desde el primer segundo para acumular golpes certeros. "Pega muy duro", reconoció el propio campeón tras la pelea. Reyes le hizo daño y le rompió los esquemas. En el primer asalto, Jones incluso llegar a ir al suelo tras una contra que impactó en su pecho. Había potencia en los puños de su oponente y el estadounidense cambió su cara. Estaba agobiado. En el segundo asalto no carburó tampoco y al finalizarlo en la esquina le fueron claros: "Debes derribarlo".
Lo hizo Jones en el tercer round, pero fue un visto y no visto, porque Reyes se levantó como un resorte. Los golpes claros fueron suyos, pero ahí dos jueces vieron un asalto diferente... porque el tercer juez ya llevaba viendo otra pelea varios minutos. El despliegue físico del aspirante comenzó a acusarlo desde el cuarto. Bajó la presión y Jones emergió. Estuvo cómodo, lo que se tradujo en derribos, aunque no duraron mucho, y en dominio. En último acto fue claro. Jones lo intentaba, pero Reyes gastaba sus últimas fuerzas para escapar y no recibir impactos. Tenía la receta, pero le faltó un poco de cocción. Tras el enfado, los fans pedían revancha inmediata. Habrá que esperar. Jones había manifestado estar "desmotivado" en el semipesado, pero no se mojó al terminar. "Ahora es momento de disfrutar", espetó al hablar de futuro. Tras su victoria más sufrida quería vivir el momento. Lógico. Se salvó 'in extremis'.
Shevchenko dio una nueva exhibición
Muy diferente fue la pelea que enfrentó a Valentina Shevchenko y a Katlyn Chookagian. La peruana, nacionalizada ya que nació en Kirguistán, iba a una velocidad muy superior que su oponente. Entraba, pegaba y salía con una facilidad pasmosa. Dominaba arriba y cuando al final del primer round llevó la pelea al suelo, la encarrilló. Con un único codazo provocó un tremendo corte a Chookagian, quien no perdió la cara al pleito, pero era inferior. En el segundo asalto Shevchenko volvió a repetir. Dominio arriba y mucha presión en el suelo. En el tercer round fue Chookagian la que intentó el suelo tras una buena rodilla. Se equivocó por completo. Valentina la puso con la espalda sobre la lona, empezó a meter presión con un candado y la remató con múltiples golpes. Recital absoluto. El peso mosca está hecho para ella. Se siente cómoda y de momento ha logrado lo mas difícil: limpiar la división.