Jedrzejczyk: la historia y la redención la esperan en Toronto
La polaca se enfrenta en el UFC 231 contra Valentina Shevchenko por el título del peso mosca. Hace el cambio tras perder el cinturón paja hace más de un año.
Rosa Namajunas quebró el reinado de Joanna Jedrzejczyk. La polaca había ganado el título en 2015 y había sumado cuatro defensas hasta que se cruzó con la lituana. En el UFC 217 fue noqueada. Se quedaba sin título y sin invicto. Quería revancha y la tuvo en el UFC 223. Esta vez la pelea llegó a los puntos, Jedrzejczyk volvió a caer, aunque creía que mereció mejor suerte. Era un duro golpe, pero lejos de decaer decidió reinventarse. Continuó en el peso paja, pero tardó tres meses en meterse de nuevo al octágono. Derrotó a Tecia Torres y volvía a mirar alto.
Tras dos derrotas consecutivas frente a Namajunas la opción de la trilogía parece lejos, por ello no dudó cuando la UFC le ofreció cambió de categoría. Subiría al mosca. En esa división, de reciente creación, se habían quedado sin campeona después de que Nicco Montaño no diese el peso en su primera defensa ante Valentina Shevchenko. La UFC fue implacable. Le retiró el título y buscó una retadora para Shevchenko: Joanna. El combate se vendía por si sólo, pues la peruana (nacida en Kirguistán) ganó mucho cartel cuando cayó, de manera discutida, ante Amanda Nunes por el cinturón del peso gallo. Además, por si fuese poco, Jedrzejczyk puede convertirse en la primera mujer en la UFC que logra el título en dos categorías.
Shevchenko siempre mantenía que su división era una menos y prometió en As mostrar su mejor versión ante Montaño, pero tuvo que esperar. Este sábado en el UFC 231 tiene la oportunidad, aunque la pelea será mucho más difícil. El peso será clave, pues Jedrzejczyk sube de categoría y ella baja. La diferencia de altura es mínima, pero Shevchenko podría pelear con varios kilos más. Una ventaja, o no ante una luchadora tan rápida como la polaca. O no tanto, porque en las apuestas Shevchenko es clara favorita. Pese a ese dato, la igualdad es máxima. Dos peleadores a las que les gusta la pelea en pie se cruzan. Los fallos condenarán, ambas deben ir con cuidado. Shevchenko quiere la gloria. Jedrzejczyk, la historia.