El equipo alemán T-Mobile despidió al ciclista Patrik Sinkewitz, quien dio positivo por testosterona en un control por sorpresa previo al Tour de Francia y renunció este mismo martes a un contraanálisis.

Así lo anunció el portavoz del equipo, Christian Frommert, quien además elogió la decisión de Sinkewitz de no ir a la prueba B, puesto que con ello admite, de hecho, que dio positivo.

El ciclista, de 26 años, quien dio positivo por testosterona en un control por sorpresa efectuado antes del inicio del Tour, debía someterse hoy a la segunda prueba y la renuncia a un contraanálisis evidencia el positivo que podría suponer una suspensión de dos años.

El abogado del corredor alemán, que dio positivo en un control realizado por la Agencia Antidopaje alemana el 8 de junio durante unos entrenamientos en los Pirineos, comunicó hoy la decisión de su cliente a través de un comunicado de prensa.

Para Sinkewitz, el Tour 2007 terminó tras la octava etapa, cuando sufrió una severa caída tras colisionar con un peatón, que le obligó a ser hospitalizado con diversas fracturas de nariz. Poco después de conocerse el resultado positivo, en un control en el que se le detectaron niveles de testosterona seis veces por encima de lo normal, fue suspendido por su equipo, el T-Mobile.

Con la negativa de Sinkewitz a someterse a un nuevo control, y tras el positivo de Iban Mayo, Alexander Vinokurov y Cristian Moreni, serían cuatro los casos de dopaje desvelados en la ronda francesa.

Sinkewitz admite dopaje y se suma a lista confesiones de T-Mobile

El ciclista alemán Patrik Sinkewitz admitió haberse dopado, semanas después de dar positivo por testosterona en un control previo al Tour, y se sumó a la larga lista de confesiones del equipo T-Mobile o su antecesor Telekom.

Unas horas después de haber renunciado al contra-análisis, lo que equivale a dar positivo, y de ser despedido por ese equipo alemán, los abogados de Sinkewitz emitieron un comunicado en que éste admite haber tomado sustancias para compensar su déficit en testosterona.

Sinkewitz admite ahí haber actuado "irreflexivamente" y cometido "una tontería", pero sostiene que piensa volver a "un nuevo ciclismo" después de su presumible suspensión.

El ciclista, de 26 años, debía someterse hoy a la segunda prueba y tiene ahora ante sí la amenaza de una suspensión de dos años.

El corredor alemán dio positivo en un control realizado por la Agencia Antidopaje alemana el el 8 de junio durante unos entrenamientos en los Pirineos.

Para Sinkewitz, el Tour 2007 terminó tras la octava etapa, cuando sufrió una severa caída tras colisionar con un peatón que le obligó a ser hospitalizado con diversas fracturas de nariz.