La belga Kim Clijsters, primera cabeza de serie, revalidó hoy su título de campeona del Masters de tenis femenino al vencer en la final 6-2 y 6-0 a la francesa Amelie Mauresmo.

El partido disputado en el Staples Center de Los Angeles no tuvo más historia que ver el dominio completo de Clijsters que dominó con sus golpes desde el fondo de la pista a Mauresmo, que no fue ni la sombra de la que se había enfrentado en las semifinales a Justin Henin-Hardenne.

Clijsters, con un 78 por ciento de efectividad del primer saque, 16 golpes ganadores, seis "break poits" y 55 puntos ganados, impuso siempre el ritmo y tuvo el control del partido.

El triunfo permitió a Clijsters conseguir su mejor victoria del año después de seguir sin ganar un torneo de Grand Slam y también perder el puesto de número uno del mundo que será para su compatriota Henin-Hardenne. La otra compensación para Clijsters fue el premio de un millón de dólares que recibió por haber ganado el Masters, el de mayor valor para una competición individual femenina dentro del deporte profesional.

"Ganar de nuevo el Masters me permite terminar el año con nota positiva y más motivada que nunca en la lucha por seguir mejorando la próxima temporada", declaró Clijsters, que también tendrá que jugar la final de dobles con la japonesa Ai Sugiyama.