Riquelme y Saviola, los derrotados por la crisis

El tiempo, los errores y las derrotas devolvieron a Bonano a la titularidad. Hoy, desde ahí, el veterano Tito aconseja a Javier Saviola y Román Riquelme, sus paisanos caídos en desgracia: "Cuando te toca vivir un momento así hay que afrontarlo como un desafío personal. Lo único que sirve es resignarse y trabajar al máximo para revertir una situación que es desagradable para todos. Lo digo por experiencia".

Saviola y Riquelme pagan los platos rotos de una crisis que no pilotaron. La tozudez de Van Gaal les ha mandado al banquillo de suplentes. Buena gente los dos, disciplinados y obedientes, dicen que se esfuerzan en los ensayos para recobrar la confianza del técnico. Saben que es cuestión de esperar. Cuando la patata vuelva a quemar será otra vez su hora.

No hay nadie, nadie, en Argentina que entienda el porqué de la suplencia de Riquelme y Saviola. Román fue durante al menos dos años la referencia clara del Boca Juniors que logró no sólo el campeonato local, sino también la Copa Libertadores (equivalente a la Champions League) y la Intercontinental. El Pibito, tras una tempranera irrupción en el primer equipo del River Plate, se convirtió en una de sus principales armas ofensivas, y justo antes de fichar por el Barça fue coronado mejor futbolista del Mundial Sub-20 disputado en Argentina. Los dos llegaron al Barça como auténticos cracks, como los fichajes estelares de las campañas 2001-02 y 02-03. Louis van Gaal los ha convertido en un dúo prescindible.