El Comité de Competición clausurará hoy el Camp Nou por los incidentes acaecidos durante el último Barça-Madrid. En principio, todo apunta a que la sanción oscilará en torno a los dos partidos, aunque la decisión definitiva dependerá del resultado de las deliberaciones de una reunión, que se prolongará hasta la noche, en la que se debatirá si los altercados son constitutivos de una falta grave, de uno a tres encuentros, o muy grave, de cuatro a un año, calificaciones que este mismo organismo utilizó para la incoación del expediente.

La resolución se fundamentará, principalmente, en que el reglamento considera como elemento de especial protección el desarrollo del juego, precepto que no fue cumplido al ser suspendido durante dieciséis minutos por el árbitro, a lo que se añadirán los agravantes de que los altercados fueron multitudinarios y que se arrojaron objetos que debían haber sido requisados en la entrada (entre ellos la botella de whisky y la cabeza de cochinillo), así como bengalas. Esta circunstancia se ponderará con el atenuante de que ni los jugadores ni ninguno de los integrantes del equipo arbitral (segundo componente de especial protección) fueran alcanzados. El fallo será independiente de la propuesta de cierre por un mes que recientemente remitió Antiviolencia a la secretaría de Estado para la Seguridad y el Barcelona dispondrá de diez días de plazo para recurrir a Apelación, organismo integrado por un representante de la Federación, otro de la Liga y un tercero consensuado, y de otros quince para acudir al CEDD, en donde podrá pedir la suspensión cautelar al no estar en vigor la nueva norma que anula la obligatoriedad de conceder esta medida.

Tras enviar nuevas alegaciones, el club azulgrana hizo público un comunicado en el que se recogía una de las pruebas aportadas al proceso, la declaración solicitada al coordinador de seguridad, Ramón Ramos, en la que se especifica que las medidas adoptadas sobre este apartado fueron "racionalmete exigibles", y en el que, tras lamentar los acontecimientos, se argumentaba que "por hechos imputados a espectadores no puede ser acusado de una infracción grave o muy grave". Asimismo, notificó que hoy, en el partido de Champions ante el Newcastle, pondrá redes en los fondos para evitar el lanzamiento de objetos. Un segunda consideración que deberá estudiar Competición es si abre expediente a Joan Gaspart por sus declaraciones.