Un furioso ataque de la armada española acabó ayer con el liderato del IMX 45 Mean Machine holandés en la Copa del Rey y ahora el B&C 52 Caixa Galicia de Roberto Bermúdez es el nuevo líder de la prueba con otras siete embarcaciones españolas precediéndole en la clasificación. La jornada se abrió con una victoria en la primera manga del Farr 53 Azur de Puig al mando de la infanta Cristina que superó a todos sus rivales en tiempo real y compensado. Sólo el Caixa Galicia pudo seguir a su estela después de superar incluso una autopenalización por fuera de línea.

El Mean Machine aguantó la presión de los veleros españoles y con la tercera plaza se mantenía aún en el liderato. Pero en la segunda manga la subida del viento, que llegó a puntas de 15 nudos, favoreció el ataque del JV52 Banco Espirito Santo que superó a todos sus rivales y ganó la manga con claridad, neutralizando una mala clasificación en la primera (decimotercero) para colocarse en la tercera posición.

El Azur siguió con su gran jornada y ni perdió la estela del BES en ningún momento para acabar segundo por delante del Bribón patroneado por SM El Rey y alcanzar la segunda plaza de la general. El Sinergia 40 Retevisión de Jordi Calafat parecía realmente inalcanzable en la clase IMS 600 y su triunfo en la primera manga, le confirmaba en cabeza.

Pero en la segunda, el Rodman 42 Telefónica Movistar de Pedro Campos le daba la respuesta para imponerse con más de dos minutos sobre el Retevisión que, además, se veía superado por el Forum Filatélico de Gonzalo Araújo. Ahora la lucha en cabeza entre estos barcos y el Ono de Iñaki Castañer, marcará la lucha por el título.

Regata larga.

Hoy se disputa la regata larga de la Copa del Rey, una manga costera de 100 millas náuticas (185 kilómetros) que se iniciará a las 13 horas y saldrá de la bahía de Palma después de realizar un triángulo de 5 millas en la bahía para tomar la boya de desmarque y dirigirse al norte hacia la isla de Dragonera, después a Cabrera, realizando un través hacia el cabo de Ses Salines, para finalizar en Punta Regana a la entrada de la bahía.

Una travesía durísima en la que los tripulantes deberán afrontar las encalmadas nocturnas, además de un régimen estricto de alimentación.