Joan Vilà, el hombre que susurra a Take

Joan Vilà es una auténtica leyenda en ‘Can Barça’. Emblema del ADN blaugrana, de sus manos se acabaron moldeando jugadores de la talla de Xavi Hernández. Con más de 40 años bregando en el FC Barcelona, acabó marchando del club por discrepancias en la metodología de trabajo en el fútbol base. Desde hace más de una década, dirige con una empresa, Go Up Players, de asesoramiento futbolístico, que cuenta con clientes como Gerard Delofeu, Marc Bartra, Carles Pérez y Lucas Vázquez, entre otros. Pero es Take Kubo quien lleva más años con ellos y el que más alegrías les está dando en los últimos meses...

¿De dónde viene su relación con Take Kubo?

Hace once o doce años, en el 2011 creo, cuando entré como director de metodología de la mano de Zubizarreta. Fui a un campus en el Japón y lo vi. Hice un informe de él y Óscar Hernández, no el hermano de Xavi, sino un entrenador de infantil, hizo otro. Decidimos traerlo para aquí. Sus principios fueron difíciles. Vino con su madre y hermano de 4 años, sin entender una palabra del español. Hemos tenido mucha relación. Es como un hijo para mí.

¿Por qué se tuvo que marchar?

A los 15 años no podía haber jugadores extracomunitarios por una normativa de la FIFA, por lo que teníamos que esperar a que cumpliera los 18 para recuperarlo, pero me consta que no se hizo un seguimiento muy serio. En estos años jugó en Tokio y en Yokohama, entrando en la selecciones de su país. Con 16 o 17 años ya jugaba primer equipo de Tokio. Cuando tenía 18 años, el Barcelona le llamó. Pero no hizo ninguna apuesta por él. No demostró ningún interés. Y al final se decantó por el Real Madrid.

El club dijo en su día que su agente pedía un millón de euros de ficha...

Es cierto que había una discrepancia económica. Pero Kubo me ha dicho que eso no era tan importante. Era una cuestión que no se apostaba por él.

¿Por qué no triunfó en el Real Madrid?

La verdad es que no llegó a jugar en el Real Madrid, al menos en el primer equipo. Ha estado cedido en otros clubes.

¿Tiene alguna explicación de su explosión en la Real Sociedad?

Ha encontrado el lugar adecuado con Imanol. Ha estado en equipos para no bajar y ahora no es lo mismo. Un equipo serio, muy guapo, organizado, buenos compañeros. Está como pez en el agua. Ha madurado mucho. Juegan un fútbol ofensivo, el entorno es adecuado. Sinceramente, conociendo a Take, esto irá a más.

¿Cuáles son sus principales virtudes?

Su inteligencia. Muy vivo. Mucha calidad técnica, una pierna izquierda espectacular. Ahora además es explosivo, rápido, vertical. Entiende muy bien el juego. Esta compenetración con Zubimendi, Brais y el resto se nota y se ve.

¿En qué tiene que mejorar todavía?

Se tiene que mejorar siempre en todo y ser exigente. Pero él mismo es muy autocrítico. Siempre había hecho goles, pero no es el típico goleador. Este año está mejorando en goles y asistencias.

¿Cómo es su trabajo con Take?

Llevamos ya quince años haciéndolo. Lo hacía ya cuando era entrenador. Me interesa también el trabajo individual. El equipo es la suma de la aportación de cada jugador. Primero hacemos una revisión del jugador. Unos diez o quince partidos. Analizamos su juego. ¿Qué hace en cada momento? Primero le pedimos compromiso absoluto. Queremos mejorar su rendimiento. Si no hay compromiso, fuera. A dos jugadores les hemos tenido que decir que dejadlo estar. Una vez que tenemos este estudio, nos sentamos con él y lo analizamos. Hacemos un debate y priorizamos. Hacemos una priorización de sus necesidades. Cada semana lo hacemos de manera ‘on line’, algunas veces son presenciales. Aparte de estas sesiones, el jugador también se autoevalúa para que vea si está bien o no. Tenemos más de 200 fundamentos ofensivos y defensivos. No sólo estamos hablando sólo de ADN Barça. No haremos nada en contra de lo que te diga el entrenador. Nosotros nunca seremos un poder detrás el entrenador.

¿Trabaja sólo con jugadores jóvenes?

No. Tenemos tres jugadores de más de 30 años y nos dicen que ojalá esto lo hubiera hecho diez años antes. No estamos para darle la palmadita en la espalda sino para mejorar su juego.

Carles Puyol también fue uno de sus clientes, ¿no?

Sí, en el 2008. Le dimos tres o cuatro claves de cosas que no era consciente, tenía 30 años. En seis meses pasó de ser criticado por todos, que le llamaban caducado, a ser escogido mejor defensor de la Eurocopa. Nos dio las gracias públicamente.

Hágase un poco de autobombo, díganos alguno de sus clientes en nómina...

Bartra, Lucas Vázquez, Carles Pérez, Sergi Gómez. Nos han venido a buscar. Eso es lo más importante. Funciona mucho el boca oreja. Trabajamos también con jugadores mexicanos, chinos. Con más de cien jugadores.

¿Sigue en contacto con Xavi?

Claro. Vamos quedando para comer. En su último año como jugador del Al Sadd, nos llamó y estuvimos un año haciendo sesiones ‘on line’ para prepararlos en su etapa como entrenador.

¿Cómo ve al Barça?

Tenemos el agravio comparativo de compararlo con el mejor Barça de la historia. Messi, Iniesta, Xavi... eso es incomparable. Xavi tiene muy claro el estilo de juego y su idea. Pero eso se plasmó porque hubo un trabajo previo en el fútbol base. La idea del juego sólo la tienen interiorizada los de casa. Los jugadores que vienen de fuera te pueden ayudar, pero no es lo mismo.

¿Y el fútbol base?

No se está trabajando bien el fútbol base. Salen jugadores como Balde, Fati, pero no producto a un trabajo con una idea de juego. Por eso no se ve plasmado en el campo. Todo eso requiere trabajo.

¿Qué le falta?

Ahora hay mejor equipo que hace dos años. Cuando llegó Xavi era una plantilla muy floja. Este ADN lo han de llevar los jugadores de casa.

Le veo preocupado...

Es muy complicado pedir ahora que el Barcelona recupere este sentido de jugar. Si no al final, seremos un equipo más. Como club, si no tienes un trabajo profundo en la cantera lo tienes mal. La solvencia económica ya la tienen otros.

¿Cómo valora la irrupción de Lamine Yamal?

No es un jugador estilo Barça. Es un crack que destaca porque tiene unas cualidades innatas. No es fruto del trabajo del Barça, sino del talento individual. No se trata de fichar jugadores de 20 años, sino de trabajar con chavales de 14 años y apostar por ellos. Es la única forma de tener hornadas de jugadores con esta idea. Y has de creer. Mucho mérito de Cruyff y Pep, y ahora le toca a Xavi. El que falla no es Xavi. Cruyff lo tuvo difícil también, pero con su personalidad lo consiguió todo. Guardiola era un fiel defensor de la idea y Xavi cree al cien por cien, pero el entorno...

¿Veremos alguna vez a Vilà otra vez en el Barcelona?

Mi etapa en el Barcelona han sido 40 años. Creo que ya es una etapa pasada, pero Xavi sabe que puede contar conmigo para lo que crea conveniente.

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