Mamardashvili se gana una mejora

Una de las escasas buenas noticias que ha tenido el Valencia esta temporada, al menos en LaLiga, ha sido la sorprendente irrupción de Giorgi Mamardashvili. El georgiano llegó cedido del Dinamo de Tbilisi en verano y el Valencia ejecutó su opción de compra por 850.000 antes de acabar el 2021 tras un inicio de curso donde el meta pasó de apuntar a jugar en el filial, a asentarse como segundo portero del equipo solo por detrás de Jasper Cillessen. Pese a mantener a Giorgi con ficha filial y con una ficha de las bajas de la plantilla, el Valencia le 'blindó' con una cláusula de 20 millones que con el paso de las temporadas aumenta de cinco en cinco millones y le hizo contrato hasta 2024 con opción unilateral del club de ampliar a 2025...Pero parece que visto el nivel del georgiano eso se ha quedado corto.

Y es que desde que el meta firmara aquel contrato en Navidad, su nivel ha aumentado más si cabe. Grandes partidos en LaLiga, artífice de llevar al equipo a la final de Copa y una cita en La Cartuja donde fue el mejor del Valencia, le han servido para hacerse con la titularidad al 100% desbancando a Cillessen y han llevado a que el Valencia tenga claro que Mamardashvili es su portero de futuro y de presente. La apuesta del club para la próxima campaña y a corto plazo. Quien defienda con seguridad la meta valencianista. Y claro, esa mejora de posición dentro de la plantilla conlleva una mejora contractual que dista de la que tiene actualmente como, sobre el papel, jugador con ficha filial y segundo portero de la plantilla.

Por ello, el Valencia y el futbolista ya han iniciado las conversaciones para mejorar el contrato de Girogi y asignarle el rol contractual que le corresponde por importancia en la plantilla. No se trata de un elemento que vaya a producirse ya, pues hasta resolver los 'casos' de Carlos Soler y Gayà, y hasta conseguir vender a Gonçalo Guedes, Peter Lim de momento tiene en 'stand by' todos los movimientos valencianistas. Sin embargo, sí se ha producido ya una primera toma de contacto entre las partes y la sintonía es buena, muy buena. Mamardashvili está feliz en Valencia y quiere seguir defendiendo la meta che pese a los intereses de equipos extranjeros que ha recibido, el jugador considera clave para su carrera afianzarse en un grande como el Valencia y se ve en la entidad che durante las próximas temporadas.

Por ello, la mejora llegará con el paso de las semanas. En la entidad quieren además blindar a su portero más si cabe, si bien una cláusula como la actual que llegará a los 30 millones de euros se considera elevada (el Valencia solo ha vendido a seis jugadores en su historia por encima de ese valor), además hay que recordar que Giorgi llegó por una cantidad pírrica a Mestalla y los ingresos por venta serían casi en la totalidad en neto. A sus 21 años y con su 1,97 de estatura, Mamardashvili ha irrumpido en LaLiga con tal potencia que pese a ser el Valencia el cuarto equipo más goleado, con él bajo los palos ha dejado la meta a cero en ocho partidos. Una cifra a la que agarrarse de cara a mejoras futuras en la zaga che.