ATLÉTICO DE MADRID

El pequeño paso que falta

El Atlético de Madrid demostró que sigue siendo una máquina de competir. Se siguió el plan de Simeone en la eliminatoria, pero no hubo acierto en la vuelta. Hay cuatro puestos a reforzar.

El Atlético nadó hasta morir en la orilla. El plan de Simeone en la eliminatoria pasaba por salir lo más indemne posible de Mánchester, con una formación muy defensiva para frenar el torrente ofensivo del City y apretar en casa ante su gente con el pase decidiéndose en el Metropolitano.

Sin embargo, esta temporada los resultados no han acompañado en el feudo colchonero. En total, el Atlético se despide de la Champions con tres empates y dos derrotas en sus cinco encuentros de local y ni la fantástica segunda mitad ante el City, obligando a los de Guardiola a replegarse y a perder tiempo para frenar las acometidas, sirvió para romper la racha. Y, si el plan de Simeone se siguió a rajatabla, consiguiendo manejar los tiempos de los dos partidos, la sensación es que al equipo le faltó un pequeño paso para estar en las semifinales.

Desde el primer instante, la premisa rojiblanca pasaba por intentar equilibrar la inferioridad futbolística contra el City. El Cholo dejó claro en cada declaración pública que "son posiblemente el mejor equipo del mundo", por lo que el primer objetivo era anular a un gran rival. Una genialidad entre Foden y De Bruyne rompieron el cerradísimo entramado defensivo de Simeone y sumaron una ventaja que obligaba al Atlético a tener que abrirse y buscar el gol en la vuelta. Sin prisas en la primera mitad, en la segunda el equipo vio como se le iba agotando el tiempo y acabó atacando a tumba abierta con la entrada de Carrasco, De Paul, Correa, Cunha y Suárez. Un potencial ofensivo enorme que tenía guardado Simeone en la recámara, pero que finalmente no fue suficiente. Quizás le faltó más minutos sobre el césped.

El Atlético cayó con orgullo y compitiendo, algo fundamental para la afición y para Simeone. "Tengo prioridades en la vida. La primera es ganar. Después es estar orgullosos de lo que hacemos. Tenemos una afición extraordinaria, apretando al equipo y al final contestando a lo que mostró el equipo. Siento orgullo por lo que es el Atlético. Compite, tenemos nuestras formas, quizás buenas, malas o que no gustan, pero competimos. Aquellos futbolistas y estos lo han logrado. Tirarse de cabeza a por la pelota, darlo todo sabiendo que los rivales son mejores. Está claro que no ganamos y eso es lo más importante".

El sueño de la Champions se vuelve a escapar, y para volver a intentarlo el año que viene el Atlético tendrá que apretar en Liga, ya que el Betis y Real Sociedad le pisan los talones y queda un calendario final complicadísimo. En el caso de conseguirlo, la sensación de la eliminatoria contra el City es que el equipo puede competir contra cualquiera, aunque tiene puntos a reforzar. Felipe acabó expulsado después de hacer una buena eliminatoria defensiva, acompañado por unos enormes Savic y Reinildo, pero ya es su segunda roja en Champions y su contrato finaliza en junio. Las lesiones de Giménez y Savic han sido un gran lastre para el equipo, y la lupa está puesta en esa zona del campo, mejorada notablemente con la aparición del mozambiqueño en enero.

Falta fluidez y el asunto del '9'

En el carril derecho, la salida de Trippier ha obligado a Llorente a acumular muchos minutos en la defensa. Vrsaljko, la primera alternativa, acaba contrato en junio y Wass, firmado en enero, únicamente jugó los 45 minutos previos a su lesión. En el centro del campo, Kondogbia ha dejado dos grandes eliminatorias contra United y City, en esa función para robar y salir. Pero ha faltado algo más de creatividad a su lado, donde ni Koke ni De Paul han conseguido acelerar el juego. Llorente tampoco lo ha hecho cuando ha participado ahí y Lemar dejó buenos minutos ante el City intercalados con espacios con poco protagonismo. Curiosamente ha sido Herrera un jugador clave para mejorar la fluidez del juego colchonero, pero es otro de los que acaban contrato en junio. El mexicano ayudó antes del parón a enfrentarse a equipos más cerrados, que ceden el balón al Atlético en una faceta del juego que sigue costando mucho para los de Simeone.

Por último, el cuarto de los futbolistas que acaban contrato en junio es un Luis Suárez que en la Champions sufre ante el ritmo altísimo de juego y la poca velocidad punta para jugar a tantos metros de la portería rival. De cara al verano, el Atlético concentra talento en ataque, João Félix ha ido creciendo y también ha demostrado estar preparado para sumar como referencia en punta, pero con la marcha de Suárez no quedaría ningún nueve puro en la plantilla. Un jugador acostumbrado a participar de espaldas y a correr cuando se repliega en campo propio, aunque Cunha ha ido creciendo en ese papel. Al Atlético no le ha servido con que se jugase a lo que quería Simeone para superar al City, pero dejó una prueba más de que es un equipo y un proyecto vivo y que puede competir contra cualquiera sin preocuparse por lo que opinen desde fuera. Orgullo, pasión y sentimiento, rezaba la grada antes del partido. Una afición que sigue volcado con el equipo. Ahora falta ese pequeño paso para una vuelta a las semifinales de la Champions que se escapan desde 2017.

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