El Chelsea titubea: fórmula original sin Lukaku

En los albores de la tempestad, las dudas vuelven al Chelsea. El equipo de Thomas Tuchel cayó por un dramático 1-4 frente al Brentford el pasado sábado en Stamford Bridge. Un resultado inesperado para los blues que hasta entonces habían encadenado 15 partidos sin perder, pero que se han quedado definitivamente fuera de la carrera por la Premier League, 14 puntos por debajo del líder, que es el Manchester City de Guardiola; y a 13 por detrás de su más inmediato perseguidor, el Liverpool de Klopp. Así pues, la única vía para el Chelsea es la Champions League. El torneo del que salieron vencedores la temporada pasada y que en esta edición les ha vuelto a enfrentar al Real Madrid, que jugará en Londres el próximo miércoles. A pesar de que el equipo blanco nunca ha vencido a los blues, Tuchel sabe que es el mayor desafío de la temporada, y por eso, después de la derrota ante el Brentford, enardeció a su afición: "En la primera mitad sentí que era un partido amistoso, necesitamos una mejor atmósfera contra el Madrid".

El entrenador alemán se ha convertido en las últimas semanas en el faro del club, que está pasando por uno de los peores momentos de su historia. La sanción a Roman Abramovich, la congelación de las cuentas del Chelsea y el controvertido proceso de venta de la entidad no habían afectado aparentemente al rendimiento deportivo del conjunto de Tuchel, que se había sobrepuesto a las malas noticias son seis victorias seguidas desde el anuncio de la mencionada sanción, pero el sábado se reencontró con sus peores males...

El Chelsea salió con un esquema poco habitual compuesto por dos centrales y dos laterales en defensa, y terminó vapuleado. El sistema de 4-3-3 no convenció a los aficionados blues, acostumbrados al clásico 3-4-3, con tres centrales y dos carrileros, con el que el equipo concede menos y tiene más frescura en ataque. Pero Tuchel lo desechó y apostó por jugadores con poco peso en sus onces esta campaña como Loftus-Cheek o Werner. "No estábamos atentos ni un 1% pendientes del Real Madrid para hacer la alineación", replicó el técnico después del encuentro.

Sin embargo, las rotaciones no terminaron de surtir efecto y la fórmula original se ha terminado por ver reforzada. Una propuesta en la que Christensen, Thiago Silva y Rüdiger protegen el área de Mendy; Azpilicueta y Marcos Alonso ocupan las bandas; Kanté y Kovacic mueven al equipo desde la medular; y el americano Pulisic junto con el marroquí Ziyech son los escuderos de Havertz en el tridente de ataque. Así salió el Chelsea en el partido de ida de octavos de final ante el Lille y así podría salir contra el Real Madrid.

Solo Reece James y Mount podrían sugerir alguna variación en el once, en el que Jorginho parte con desventaja por la buena temporada de Kovacic y en el que Lukaku ha perdido el sitio. El delantero belga fue el gran fichaje del Chelsea para esta campaña, pero desde que reconoció que quería volver al Inter, a finales de 2021, su rendimiento se ha desplomado y Tuchel le ha mandado al banquillo. Kai Havertz, uno de los jugadores pretendidos por el Madrid en el verano de 2020, es la punta de lanza de un Chelsea que esperará al Real Madrid replegado atrás y que buscará hacerle daño en las transiciones ofensivas, como ya lo hizo el curso pasado con mucho éxito.