Un partido para perseguir el sueño del ascenso
Blanquivioletas y amarillos necesitan la victoria para acercarse a su objetivo. El duelo por el balón será clave y enfrentará a Roque Mesa y a Jonathan Viera.
Real Valladolid y Las Palmas persiguen un sueño: regresar a Primera (sigue el partido en directo en AS.com). Los blanquivioletas están inmersos en la pelea de lograrlo de manera directa, mientras los canarios, con una racha nefasta, necesitan los tres puntos para soñar con alcanzar los puestos de promoción. Y llegan ambos equipos al encuentro tras haber perdido el último encuentro con las mismas premisas: ambos se quedaron con 10 jugadores en la primera parte. De hecho, los canarios terminaron con nueve ante el Girona (1-3) en el Insular y con una sensación de frustración que arrastran desde hace demasiadas semanas, con cambio de entrenador incluido. Y es un encuentro entre dos equipos que quieren tener el balón y correr. Ambos conjuntos se encuentran más cómodos con espacios.
El Real Valladolid, tras perder su imbatibilidad tras once encuentros, pretende volver a la senda del triunfo ante el conjunto amarillo. La semana ha servido para ver al mismo ritmo que sus compañeros a Nacho y Weissman, que no fueron titulares en Oviedo, aunque no se ejercitaron Hervías y Plano, por lo que es probable que sean positivos, aunque el club, variando su política de comunicación, no informa de ello.
Para este encuentro, por tanto, las grandes novedades podrían ser Nacho, que entraría por Carnero, sancionado por la expulsión en el Tartiere, y Weissman, ya recuperado, que entraría por un Óscar Plano, que se sospecha está con covid. El resto del equipo parece que será el habitual, con la pareja de centrales que viene jugando El Yamiq y Javi Sánchez, con Plata y Toni Villa en los extremos y Sergio León acompañando al hebreo. La única duda puede estar en el centro del campo. Con Roque Mesa, fijo, ante su exequipo en un encuentro muy especial para él, el momento menos brillante de Aguado puede precipitar la entrada de Monchu en el once.
Por su parte, a día de hoy, Las Palmas anida a 17 puntos de su rival de hoy, que dejó de ser directo hace tanto tiempo que hasta cuesta recordarlo. Permanece asimismo a ocho puntos de los puestos de playoff, por lo que todo lo que no sea ganarle hoy al Pucela supondría echar la temporada por la borda todavía más. De cara al partido de esta tarde, García Pimienta cuenta con las bajas de dos titulares indiscutibles como Raúl Navas y Loiodice. El primero de ellos será sustituido por Coco o Álex Suárez, este con menos posibilidades, mientras que Fabio, recambio principal del mediocentro galo, tampoco puede jugar por acumulación de amonestaciones. Dadas las urgencias, Las Palmas puede apostar por un centro del campo netamente ofensivo, con Moleiro y Kirian junto a Mfulu. Incluso podría colocar por ahí a Viera, el emblema de este equipo y tótem de la categoría, para adelantar al propio Moleiro. En el frente de ataque, ante la baja de Mújica, Sadiku podría tener una nueva oportunidad, premiando así su tesón cada vez que ha tenido oportunidad de jugar.
Sea como fuera, a Las Palmas le va la vida contra el Valladolid. Todo lo que no sea ganar le obligará a mirar tanto para abajo como para arriba, algo inconcebible hace unos meses ante el teórico potencial de este equipo. Se masca un nuevo fracaso, un nuevo final de temporada insufrible por mucho que Miguel Ángel Ramírez, su presidente y máximo accionista, quiera echar balones fuera, ni rastro de autocrítica. Pero el fútbol pone, de momento, a Las Palmas en un sitio en las antípodas de sus objetivos. Y eso no hay palabras bonitas o menos bellas que lo puedan esconder.
