PSG 1-MANCHESTER UNITED 2

Por algo es capitán Bruno Fernandes

El portugués hizo el primer tanto del choque, tras repetir un penalti que paró Keylor Navas en primera instancia, dando muestras de una gran personalidad.

Niviere David/ABACAPRESS.COMGTRES

"¡Oh capitán! ¡Mi capitán!", que diría Walt Whitman. Abdou Diallo derribaba a Anthony Martial dentro del área cuando el reloj marcaba 22 minutos en el luminoso del Parque de los Príncipes. Bruno Fernandes, como es habitual, cogía el balón, lo ponía en el punto de penalti y... fallaba. Keylor adivinó su lanzamiento tirándose a su izquierda. Sin embargo, el árbitro mandaba repetir. Bruno no dudó. Él es el tirapenaltis y ahora, en ausencia de Harry Maguire, también el capitán del equipo, tras recibir la noticia de boca de su propio técnico en sala de prensa. Mismo lado, ajustado al poste y Keylor se venció a su derecha. 0-1 que sentaría las bases de un triunfo que, tras el gol en propia de Martial, sentenciaría Rashford con un gol fantástico cuando la zona Cesarini asomaba.

Darren Fletcher, exjugador del United y ahora comentarista, felicitó al portugués por su muestra de personalidad y le comparó con leyendas del pasado reciente del club: "El primero no es un gran penalti, va demasiado cerca del portero, pero merece crédito. Él es el capitán, y eso (lanzar el segundo) podría fácilmente haberlo hecho un Eric Cantona o un Cristiano Ronaldo. Alguien que tenga esa confianza en sí mismo tras fallar un penalti el fin de semana y otro en ese momento. Pero sólo había una persona tirando ese penalti y ese era Bruno Fernandes".

Hay que recordar que nuestro protagonista falló desde el punto fatídico frente al Newcastle el pasado sábado, por lo que tomar la responsabilidad de nuevo, tras fallar dos penaltis consecutivos, muestra la fuerte personalidad del de Maia. El tanto supone el cuarto de la temporada para él y el tercero desde los 11 metros, tras cobrarse los castigos máximos frente al Brighton y el Tottenham en la Premier. Bruno, desde su llegada el pasado enero, se ha convertido en el jugador sobre el que gira el juego del equipo y fue la pieza que hizo funcionar al engranaje del United para firmar el espectacular final de curso pasado.

Bruno Fernandes siendo felicitado por sus compañeros tras marcar el 0-1 ante el PSG.FRANCK FIFEAFP

El propio Solskjaer reconoció su importancia en la mencionada rueda de prensa, en la cual comunicaba, tanto a él como al resto de presentes, que sería el dueño del brazalete: "Ha llegado y ya ha tenido un gran impacto. (...) Si no ha cambiado el equipo por sí solo sí que ha sido una chispa que ha despertado algo, y por eso también espero que nosotros hayamos sido el detonante de algo en su carrera. Su llegada fue un punto clave para nosotros la temporada pasada y esperemos que eso solo sea el comienzo".

Cambiador de dinámicas

Bruno cayó de pie en Old Trafford y desde su aterrizaje en el Manchester airport se convirtió en el 'Factor X' que tanto necesitaba el equipo. Ese jugador capaz de percutir constantemente en la defensa rival desde segunda línea que aportase ese extra y volviese a convertir a los de Solskjaer en diablos. El United pasó de la mitad de la tabla a la tercera posición. De su presencia se beneficiaron, y se benefician, también Marcus Rashford, Anthony Martial y Mason Greenwood, trío que vio incrementado su acierto goleador en el tramo final de la temporada.

Este año se esperaba que todo fluyese del mismo modo que lo hacía en el ocaso del anterior, pero la sonora derrota frente al Tottenham (1-6) hizo aparecer a los fantasmas del pasado reciente, llegando a rumorearse un posible enfrentamiento entre el centrocampista de 26 años y su entrenador. Algo que, tras la rueda de prensa previa al choque de Champions, ha quedado más que enterrado. El 1-4 al Newcastle y esta victoria ante el PSG demuestran que el equipo se ha despertado tras la bofetada de los Spurs. El sábado, ante el Chelsea, se enfrentará a una nueva prueba de fuego, la primera en el Teatro de los Sueños tras la debacle anterior. Veremos si cierran todas las heridas o si, por el contrario, Lampard y sus hombres vuelven a abrirlas.

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