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Jordi Masip: "Pasar el tiempo con mi hijo y mi mujer es mi clave para llevar esta situación"

El portero del Real Valladolid echa de menos las cosas cotidianas y se entrena con un balón para no perder el tacto, soñando con que vuelva el fútbol y la normalidad.

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Sigue el confinamiento obligatorio para todos los ciudadanos. Como ya hiciera la semana pasada otro de los capitanes, Moyano, esta vez es Masip el que quiso contar su experiencia y estar cerca de los que son sus aficionados, los del Real Valladolid: "Nos ha tocado vivir días extraños, aquí encerrados; llevamos unos cuantos días y ¡los que nos quedan! Es muy extraño no poder salir ni relacionarte con nadie. Es difícil para todos, pero tenemos que ser responsables, quedarnos en casa y seguir lo que se nos dice desde el gobierno".

Confinado en su casa junto a su mujer Silvia y su pequeño de tres años Álex, el cancerbero del Pucela inventa cada día su vida en esta situación: "Al despertar, desayunamos los tres juntos y a partir de ahí nos ponemos los dos, bueno los tres, a hacer un poco de ejercicio juntos; luego toca ponerse en serio y hacer yo sólo mi trabajo físico y así la mañana se va pasando más amena, intentando mantener el tono físico. Intentamos comer lo más tarde posible para que el tiempo pase. Ya por la tarde juego con el niño y con Silvia, juegos de mesa. Intentamos hacer cosas en común para estar entretenidos durante la tarde. Ya por la noche vemos la tele, alguna serie, lo típico que hace todo el mundo".

Un deportista de élite está preparado para soportar la presión psicológica que supone competir, pero estamos en un escenario absolutamente distinto: "Nadie está preparado para esto; nos ha pillado a todos de imprevisto. Es complicado llevarlo para todos, porque nadie había vivido algo como esto. Son muchos días encerrados en casa y por muy bien que estés preparado, es complicado para todos, al margen de si estás preparado para soportar la presión o no".

Unos se han pegado a la tele, otros a los grupos de whatsapp, algunos a las redes sociales y otros al ejercicio en casa. ¿A que se agarra Masip para pasar el tiempo?: "La familia es mi clave. Estar con mi mujer y con el niño hace que el tiempo pase más rápido, haciendo cosas juntos para no pensar, ese es mi pequeño truco. Luego a nivel personal me gusta echar alguna partida a la vídeo consola o leer algún libro, siempre teniendo en cuenta el tiempo que me deja Álex".

Para los adultos es complicada la situación, pero la llegamos a comprender y la asumimos, pero para los niños, cuanto más pequeños son, parece más difícil explicárselo: "Después de una semana, pobrecito, lo lleva bastante bien y se está portando bastante bien, dentro de las limitaciones que conlleva el no poder salir. Intentamos prestarle mucha atención, que esté con nosotros haciendo cosas, que juegue a las cosas que le gustan; también vemos películas juntos y esas pequeñas cosas que todos vamos haciendo, como pintar o recordar cosas que ha id aprendiendo en el colegio para que no las olvide. Pequeñas cosas que nos hacen pasar el tiempo mejor a todos".

Casi todos tenemos diferentes grupos de whatsapp, de la familia, los amigos, el gimnasio o el trabajo y los futbolistas del Real Valladolid también mantienen contacto entre ellos: "Tenemos contacto todo el equipo y vamos comentando la jugada todos. Hablamos y comentamos diferentes situaciones; hacemos bromas, al final como todo el mundo, intentamos llevarlo con un poco de humor que viene bien". Eso sí, tener a Míchel de vecino de enfrente les permite verse cara a cara cuando se asoman a la ventana: "Lo veo más que a los demás sí, y hablamos más a menudo porque estamos más cerca".

El trabajo físico es muy importante para un deportista de élite, intentando mantener el mejor tono posible, pero un portero tiene un trabajo en el fútbol muy específico y ello puede conllevar también estos días algunas diferencias: "Sigo el plan que nos ha marcado el club, pero además por mi cuenta con un balón en las manos voy haciendo pequeñas cosas particulares de un portero, para no perder el ritmo o las maneras de estar en contacto con la pelota. Juego con eso y así tengo otro tipo de estímulo, trabajando las manos y que el ejercicio sea un poco más alegre".

Los reflejos que tiene un portero se trabajan en cada entrenamiento además de traerlos cada uno de serie y la inactividad puede aletargarlos: "Está claro que cuando volvamos, no estaremos igual que cuando nos fuimos. Será mucho tiempo sin entrenar colectivamente y todos perderemos tono y pequeñas cualidades que adquirimos con el día a día. A la vuelta, si tenemos un pequeño tiempo de mini-pretemporada para recuperar, intentaremos estar lo mejor posible; ahora mismo está todo en el aire y ya veremos como acaba todo".

La vuelta a la normalidad, cuando eso llegue, nos devolverá el fútbol, aunque no se sabe si la Liga se reanudará: "Lo primero es que si la Liga se reanuda, será una buena señal para todos, significará que todo esto ha quedado atrás y que se puede volver a salir con seguridad y que la mayoría de la gente está bien. Nosotros seguimos nuestras rutinas pensando en ello. Es una posibilidad y sí que lo piensas; tenemos que estar preparados para cuando llegue ese día, que ojalá sea lo antes posible; que todo el mundo esté bien y se sufra lo menos posible".

Masip tiene claro lo que hará cuando acabe el estado de alarma y se vaya recuperando la normalidad: "Salir a la calle y echar una carrera por ahí y no parar hasta que me canse. Ya tenemos ganas de salir y de relacionarnos con la gente; tenemos ganas de las cosas cotidianas, coger el coche, ir a algún sitio, salir a comer, sacar al niño a jugar al parque, esas cosas que no valoramos en el día a día y ahora se echan muchísimo de menos".

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