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SUPERCOPA | BARCELONA - ATLÉTICO

El Atleti esquiva en Arabia los milagros de Ter Stegen

La ausencia del alemán, que en el Wanda salvó al Barça con dos paradones ante Hermoso y Morata, pone el foco en el brasileño Neto, que sólo ha jugado dos partidos oficiales este año.

Marc André Ter Stegen.
Marius Becker/dpa

No habrá duelo Ter Stegen-Oblak en Yeda. El alemán, con preocupantes problemas en la rodilla derecha ya que la tendinopatía es seria, ni siquiera viajó a Arabia. Tal vez Simeone y sus jugadores hayan respirado tranquilos. Ter Stegen se había convertido en una pesadilla para el Atlético de Madrid, especialmente en el partido de la primera vuelta en el Wanda. Entonces se inventó dos paradas de inspiración que frustraron a los colchoneros. Primero, con una increíble parada de reflejos e intuición ante Hermoso con el muslo derecho. Minutos más tarde, frustró a Morata con otro movimiento rapidísimo.

La ausencia de Ter Stegen, cuya lesión debe tener en guardia al Barça porque es la clase de portero que lo quiere jugar todo, abre de nuevo la puerta a Neto. Brasileño de 30 años, su fichaje le costó al Barça 26 millones de euros más nueve en variables en una operación de ingeniería financiera entre el Barcelona y el Valencia que mandó a Cillessen para Mestalla, trajo a Neto al Camp Nou; y además, cuadró los presupuestos de las dos instituciones.

Neto se ha mantenido en un discreto segundo plano estos meses. Hasta diciembre no jugó su primer partido. Estuvo bien en Milán, donde el Barça ganó 1-2 al Inter y él hizo algunas paradas de mérito. De vacaciones en Brasil, el club le llamó de urgencia para que adelantase su vuelta cuando comprendió que la lesión de Ter Stegen era seria. El sábado ante el Espanyol estuvo correcto, sin más. Tampoco pudo hacer mucho más en los dos goles pericos. Portero con tablas y buen pulso, se enfrenta a uno de sus primeros grandes desafíos como jugador del Barça. No es fácil enfrentarse a partidos de alto nivel con tan poca portería hecha, pero en eso sí Cillessen sí podría servirle de espejo. El holandés jugó a un nivel espectacular la Copa del Rey durante tres temporadas. Fue campeón en dos ediciones y finalista en la otra y dejó intervenciones para el recuerdo en escenarios complicados como Mestalla o San Mamés. Es un gran portero, pero seguro que en el Atleti, en parte, están contentos de quitarse de en medio los milagros de Ter Stegen.