La plaga de mosquitos que sufre Volgogrado incordió ayer en el Túnez-Inglaterra. Los jugadores de Gareth Southgate se aplicaron repelente para combatirlos, pero no fue suficiente. Y si no que se lo digan a Jesse Lingard, quien durante el calentamiento previo al encuentro tuvo que batallar contra un insecto que se le coló en el oído.
No solo jugadores y aficionados sufrieron la invasión. La periodista que la televisión pública alemana Das Erste ubicó a pie de campo apareció en pantalla con un sombrero mosquitera para protegerse. Una imagen más propia de un documental de apicultura que de un partido de fútbol...