México ya no se pone límites

México celebró por todo lo alto la victoria ante Croacia y el pase a octavos. Las noticias dicen que cerca de 40.000 mexicanos se congregaron en torno al monumento del Ángel de la Independencia para festejar, previamente habían visto la victoria en la Plaza del Zócalo. Y el presidente de la República fue uno de los más orgullosos: “Los quiero acompañar en el séptimo partido, ahí quiero estar con ustedes el 13 de julio”, fue el mensaje telefónico de Peña Nieto al seleccionador Miguel Herrera.

Las estadísticas cambian de acuerdo a las emociones, 365 días después tras no marcar con la selección nacional (aunque sólo fueran 577 minutos), el encabezado dicta que Chicharito marcó su tercer gol en Copas del Mundo con tan sólo 60 minutos de juego en Brasil, su promedio de efectividad vuelve a ser noticia. “Es un gol que me da muchísima confianza y hasta ahí, nunca me voy a sentir presionado ni nada. Yo no vivo del gol, vivo de disfrutar, de la confianza que me tengo a mí mismo y que muchísima gente, todo este año, no me la ha brindado y que no tengo que perder”.

El delantero al que se le ha minimizado por sus pocos minutos en la Premier, ahora se le recuerda como uno de los históricos a 10 goles de convertirse en el máximo goleador de México. “Las estadísticas van a estar ahí para la gente que les gusta. Tuve tres años muy buenos con la Selección y después un año que no me meten en mi club y termino en la banca. Así que hay que vivir del presente, partido a partido”.

La prensa mexicana recogió en sus portadas el triunfo de la selección. “Glorioso”, titulaba el diario deportivo Esto. “Sí se puuu...do”, dice Cancha. “Locos por el Tri” se pudo leer en la primera de Estado. Pero si de algo se hizo eco la prensa nacional e internacional fue de la manera de celebrar del Piojo, imágenes que han dado la vuelta al mundo.

Y es que el éxito de esta selección es obra y gracia de Miguel Herrera, que entendió a la perfección el puesto de seleccionador, acabó con el linaje entre europeos y nacionales. “Aquí todos somos mexicanos y representamos el mismo escudo”, fue el discurso desde su llegada. Un deseo que comparte el país entero en comunión con equipo, cuerpo técnico y prensa.