Las cosas han empezado muy diferentes a como estaba previsto en un principio para el esperado choque entre Norteamérica y Europa en la competición Rift Rivals de League of Legends, y es que los equipos de la NA LCS han conseguido demostrar ser superiores en el primer día.
Mientras que las plantillas invitadas no son actualmente las que van en cabeza en sus respectivas ligas, si que fueron las mejores del pasado split. Pero eso no quiere decir nada, y a las pruebas nos remitimos. Norteamérica venía a demostrar que ellos también son profesionales, y lo están haciendo.
El mazazo de Norteamérica
Sobre todo TSM, que se ha marcado grandes partidos en este emocionante inicio de Rift Rivals. Empezando con su duelo frente a G2 Esports, el rifirrafe fue constante y aún así la división americana logró imponerse a los campeones europeos.
Lo mismo ocurriría posteriormente con Unicorns of Love, que no parecían ellos mismos en una partida que, aunque también estuvo reñida, aportaba una clara ventaja al equipo de Bjergsen y Doublelift.
Los unicornios también perdieron contra Phoenix1, con un Exileh desubicado en todo momento, en la que sin duda está siendo su peor competición desde los mundiales de Katowice.
Fnatic, por su parte, se tambaleó en su duelo frente a Cloud9, pero al menos logró hacerse con la primera victoria europea venciendo a Phoenix1, mientras que G2 logró redimirse ligeramente a su vez derrotando a Cloud9.
Con el marcador 4-2 para Norteamérica, las apuestas han cambiado radicalmente para los próximos partidos y todo el mundo empieza ya a preguntarse si no estábamos demasiado equivocados presumiendo del gran poder de Europa.