A la tercera va la vencida
Con once años era la mejor del colegio en prácticamente todos los deportes y un día, el entrenador de halterofilia se fijo en ella y le dijo que se le podía dar bien. Al principio le dio largas, pero el entrenador insistió tanto que aceptó y se enganchó. Ahora puede presumir de haber levantado un total de 274 kg en total olímpico, de ser doble campeona de Europa y de lograr un bronce mundial, además de muchas más medallas internacionales en arrancada y dos tiempos. Le falta el pódium olímpico, un éxito que ya rozó en Pekín y sobre todo en Londres, quedándose a cuatro kilos del bronce. A la tercera va la vencida y en Río espera sacarse la espina con su primera medalla olímpica.
En Río me toca medalla olímpica sí o sí.
LIDIA VALENTÍN