Ocho días después del inicio de la huelga de transportistas, varias comunidades autónomas y determinados sectores de la alimentación se han visto afectados por los paros convocados por la Plataforma para la Defensa del Sector del Transporte.

Fábricas que han parado su actividad, lineales de supermercados vacíos y litros de leche desperdiciados son algunas de las consecuencias más inmediatas. De este modo, el sector quiere hacer ver al Gobierno su malestar por el incremento de los precios del combustible y exigen medidas que mejoren la situación laboral de los transportistas autónomos. Una huelga que, según la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (ASEDAS), está provocando “elevados costes para la economía y el conjunto de la sociedad".

Al mismo tiempo, la patronal alimentaria reclama una solución urgente ante lo que consideran un "problema de Estado". Por el momento, hay más de 32.000 empresas y 50.000 vehículos que llevan parados desde hace más de una semana. En su reunión con el Comité Nacional de Transporte por Carretera, el Ejecutivo se comprometió a subvencionar el precio del gasóleo para los transportistas, mediante una ayuda directa por un total de 500 millones de euros.

Industria láctea y flota pesquera, con una situación crítica en Galicia y en Asturias

De hecho, se trata de una huelga que afecta especialmente a varias comunidades autónomas de nuestro país. La primera de ellas es Galicia. En esta comunidad, donde la producción de leche supone un 40% de la producción nacional, la industria láctea es, junto a la flota pesquera, el sector más perjudicado. La primera de ellas se ha visto obligada a desperdiciar toneladas de leche, mientras que la flota pesquera ha amarrado muchas de las embarcaciones.

Con respecto a las empresas, el Grupo Calvo ha decidido cerrar este lunes su fábrica de conservas pesqueras en la localidad coruñesa de Carballo ante los problemas para garantizar tanto la salida de sus productos a la cadena de distribución, como la entrada de nuevos suministros. Otro de los casos significativos es el de Danone que, con unos 2.000 trabajadores y con plantas de producción en ocho comunidades autónomas, ha anunciado un paro de 24 horas.

Al igual que en Galicia, los dos sectores más afectados por los paros en Asturias también son la industria láctea, con empresas como Central Lechera Asturiana en una situación delicada, como la flota pesquera, donde se han amarrado embarcaciones, aunque no son los únicos. En el sector de la siderurgia, la única empresa de Arcelor en Europa para por la subida de la luz, mientras que en el sector automovilístico Volkswagen y Ford han parado su actividad.

La hostelería, en riesgo en Andalucía

Por su parte, en Andalucía también se han producido paros en la actividad de la flota pesquera. Sin embargo, hay un sector a diferencia de las dos otras comunidades que se puede ver afectado debido a los paros convocados, y es la hostelería. Se trata de Heineken, cuya planta de Sevilla podría quedarse sin suministros para sus clientes más directos en caso de que ésta decida parar su producción, por lo que afectaría a locales de restauración, supermercados y ocio nocturno.

Además de en Asturias, los paros han afectado a Danone en una de sus plantas de Cataluña, mientras que en la Comunidad Valenciana es el sector del transporte portavehículos quien ha secundado los paros convocados.