Tardó más de una semana pero finalmente la lava expulsada por el volcán en Cumbre Vieja, en La Palma, llegó a aguas del Atlántico. En plena noche, la colada de lava se abrió paso hasta su encuentro con el océano. Un largo camino desde que entrara en erupción el pasado 19 de septiembre, y con el que se entró en una nueva fase de todo este proceso.

A su paso por el sur de la isla, las diferentes coladas de lava han arrasado por donde han pasado, sembrando la desolación entre los vecinos palmeros. Se calcula que ha emitido ya 80 millones de metros cúbicos de lava. Una cantidad, para ponerla en perspectiva, que casi dobla la expulsada por el volcán Teneguía en 1971 (43 millones en 24 días).

Y tras alcanzar el océano, se ha generado una especie de delta, también conocido como isla baja o fajana, que crece con el paso de los días, y así seguirá mientras el volcán continúe expulsando el magma que alberga en su interior. En total son ya 28 hectáreas las que ocupa esta lava que ha entrado en contacto con el agua, y que se sitúa a unos 475 metros de la costa, según confirmó María José Blanco, del Instituto Geográfico Nacional (IGN),

Un máximo de dos kilómetros

Los expertos, a bordo del buque Ramón Margalef, monitorean la situación desde el mar, a escasos metros de donde la lava va ganando terreno al mar. Sin embargo, llegará un momento en el que su avance será interrumpido. Así lo explica Juan Tomás Vázquez, geólogo marino que forma parte del equipo en el buque del Instituto Español de Oceanografía.

"Aumenta mucho la profundidad (en el océano) y, por lo tanto, no va a tener base para seguir. Máximo dos kilómetros". Como en el caso de la erupción del San Juan en, el delta empieza a crecer más hacia la zona sur. Mientras le gana terreno al mar, se producen derrumbes que terminan siendo parte de una base en el fondo del mar. "Ayer fue muy evidente que la parte central se hundió. El propio peso, como además el material está caliente, empuja hacia abajo y hace que el frente del delta avance", detalla el experto.

Cuánto puede durar la erupción en La Palma

La historia, aquella que puede darnos pistas sobre el presente y quizá incluso sobre el futuro, nos indica cómo fue la última erupción de un volcán en la isla de La Palma. Fue la del Teneguía, en octubre de 1971. El día 20 empezó la actividad sísmica y, seis días después, comenzó la erupción, que terminó en 18 de noviembre. Fue la erupción más corta de las registradas en Canarias. Y como en este caso, la actividad sísmica comenzó en torno a una semana antes de la erupción.

Previamente, en el año 1949, el volcán de San Juan entró en erupción tras 237 años sin actividad volcánica en la isla. Empezó el 24 de junio, en la montaña del Duraznero, y terminó el día 31 de julio: 47 días de explosiones y ríos de lava. Más reciente, aunque de origen submarina, fue la erupción en El Hierro. Tras cinco largos meses (148 días), el volcán, posteriormente bautizado como Tagoro, se apagó.

¿Cuánto durará el de Cumbre Vieja? Es lo que los expertos tratan de determinar, analizando al detalle la composición de los materiales que expulsa desde el interior de su cráter. Según los primeros cálculos del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan), podría durar entre 24 y 48 días, con una media geométrica de 55 días.