CORONAVIRUS

La cepa británica desata las alarmas en Madrid

El viceconsejero de Salud Pública, Antonio Zapatero, alertó del aumento de casos de esta variante. "Entre un 7% en algunos centros y hasta en un 33,5% en otros".

Este pasado viernes, los responsables en materia de salud de la Comunidad de Madrid comparecieron ante la prensa para dar a conocer las nuevas zonas básicas de salud en las que se aplicaban medidas adicionales, además de establecer nuevas directrices para el global del territorio, ante el fuerte crecimiento de los contagios en la tercera ola.

Durante la última semana, este incremento de personas contagiadas llegó al 15% respecto a al semana anterior y, como apuntó Antonio Zapatero, viceconsejero de Salud Pública, se podría deber a la presencia de la cepa británica del coronavirus. Descubierta a mediados del mes de diciembre y con una mayor capacidad para contagiar, esta variante está incrementando su presencia en la Comunidad: cerca de un 9% de las infecciones están asociadas a ella.

"Esta transmisión está oscilando entre un 7% en algunos centros de salud y hasta en un 33,5% en otros", dijo Zapatero, quien avisó de que se trataba de una cifra "infraestimada". Desde que comenzara 2021 los casos relacionados con esta cepa B.1.1.7 no han cesado de crecer y en "dos o tres semanas" podría convertirse en la cepa dominante.

Madrid exige más medidas para el aeropuerto

Ante el incremento de casos de esta nueva cepa, además de otras como las detectadas en Brasil y Sudáfrica, desde la Comunidad de Madrid reclaman al Gobierno nuevas medidas nacionales para frenar la expansión de la misma. De este forma, el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, solicitó el viernes más controles en vuelos, trenes y autobuses que lleguen desde el extranjero. "El Ministerio de Sanidad no le da importancia a la cepa británica. Nosotros sí. Y mucha", dijo Escudero.

Cambio de parecer del Ministerio

Si en un primer momento Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), consideraba que la variante británica tendría un impacto "marginal" en España, ahora ha cambiado su criterio. Esta misma semana, el epidemiólogo señalaba que podría ser la variante dominante en el mes de marzo.