La ONU avisa: 71 millones de personas, en riesgo de caer en pobreza extrema
El organismo advierte de que la pandemia del coronavirus puede provocar que en 2020 se produzca la primera subida en niveles de pobreza desde 1998.
La pandemia del coronavirus ha provocado una crisis sanitaria a nivel global, pero también una crisis social y económica cuyos niveles aún están por cuantificar. En este sentido, según estimaciones realizadas por la Organización de Naciones Unidas (ONU), alrededor de 71 millones están en riesgo de en pobreza extrema este 2020 a causa de la crisis que ha generado la COVID-19. Según el documento, y previendo que la transmisión del virus se mantenga en los baremos esperados, el nivel de pobreza en el mundo llegará al 8,8% este año.
Este incremento de los niveles de pobreza provocaría que por primera vez desde 1998 subiría la pobreza global en el mundo. El impacto de la pandemia, eso sí, no está siendo igual en todo el mundo y está afectando a las poblaciones más pobres y vulnerables. Por eso, la ONU vaticina que donde se producirán los mayores repuntes será en países del sur de Asia y del África subsahariana.
El coronavirus, admite la ONU, está teniendo un “impacto catastrófico” en el ámbito del desarrollo, complicando el gran plan que tiene la organización contra la pobreza. La implementación de la llamada Agenda 2030, que contempla esa lucha contra la pobreza, se ha dificultado por la propagación del patógeno por todo el mundo y pone muy cuesta arriba lograr los objetivos fijados para dentro de diez años.
Confinamiento y paralización actividad económica
La ONU indica que los niveles de pobreza extrema aumentarán debido sobre todo a la situación que ha provocado en los cerca de 1.600 millones de personas que trabajan en la economía sumergida y que, con el confinamiento y la paralización de la actividad económica, han visto cómo sus ingresos se han desplomado y en muchos casos no tienen acceso a ayudas.
Freno en la vacunación y cierre de las escuelas
Además, el coronavirus también ha tenido un fuerte impacto en los niños, puesto que se han interrumpido muchos servicios de salud y campañas de vacunación, hecho que puede desencadenar miles de muertes de niños en edad infantil. Asimismo, el coronavirus ha hecho que la mayoría de los colegios tengan que cerrar y no están claras las condiciones para su reapertura, lo que implica unas graves consecuencias a corto plazo en la educación de los niños.
Hasta el momento, y según datos de la Universidad Johns Hopkins, el coronavirus ha dejado ya 11,8 millones de casos, una cifra que sigue aumentando cada día sin que se vea el final de la pesadilla. Además, son ya más de 544.000 personas las que han fallecido a causa de la COVID-19. Los proyectos de vacuna y tratamiento para la enfermedad siguen su desarrollo, pero a pesar de ello, las consecuencias sociales y económicas se van a ver a corto, medio y largo plazo.