CORONAVIRUS

Qué es la desescalada

El Gobierno trabaja en la forma en que los ciudadanos podrán ir recuperando de manera ordenada la vida normal, aunque sin un plazo cierto.

Un equipo de desinfección de la Unidad Militar de Emergencias (UME) en una residencia de mayores de Cerdanyola del Vallès (Barcelona).

Permiso para hacer deporte y salir con los niños, reapertura de tiendas, regreso a las aulas... Aunque el presidente Sánchez anunció ayer en el Congreso que regresará al Parlamento dentro de nos semanas para solicitar una nueva prórroga en el estado de alarma más allá del 26 de abril, las declaraciones de otros miembros del Gobierno y las propuestas de los expertos comienzan a apuntar a la desescalada. "La forma en que progresivamente los ciudadanos podrán ir recuperando de forma normal las calles de manera muy ordenada, para que no haya picos ni vuelta a los contagios", como la definió la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero. De hecho, este Viernes Santo se levantan las medidas adicionales que el Consejo de Ministros acordó el 29 de marzo para paralizar toda actividad económica no esencial.

"Todo este proceso de desescalado es muy complejo. Nadie en el mundo tiene las soluciones ni los criterios claros", decía este jueves la directora adjunta del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, la doctora María José Sierra.

La semana pasada, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ya se mostraba receptivo a realizar próximamente concesiones en las medidas impuestas permitiendo, por ejemplo, la práctica del deporte en la calle o que los niños puedan salir de casa. "Hay medidas, como las de ese tipo, que hay que tomar en consideración", dijo en el Congreso sin aventurar ningún tipo de fecha. El Gobierno, informa El Confidencial, ha creado un "grupo de desconfinamiento progresivo" con cargos y técnicos de diferentes ministerios para trabajar en las medidas a adoptar.

Sí señaló un plazo este miércoles la portavoz Montero: "No podemos dar por hecho nada, sólo la prórroga hasta el 26 de abril. A partir de ahí se desarrollará la desescalada", dijo en su entrevista en Antena 3. Aunque ese mismo día por la tarde el ministro Illa matizaba: "No estamos hoy en condiciones de decir qué vamos a hacer el 26 de abril".

Posibles medidas

La desescalada es un proceso con aún muchas incógnitas. "Nos estamos enfrentando a algo en lo que nadie tiene experiencia, entonces no hay respuestas claras", decía ayer la doctora Sierra. Pero dos de los expertos que asesoran a la Generalitat de Cataluña señalan los pasos que deberían venir. En un documento en el que exponen la "salida coordinada del confinamiento", el epidemiólogo Oriol Mitjà y Joel López proponen actuaciones en cuatro ámbitos: el desconfinamiento secuencial de personas en riesgo, la evaluación de la inmunidad de la población, la detección precoz de casos y contactos y medidas de confinamiento localizadas en zonas calientes.

Mitjà y López proponen que el confinamiento se lleve a cabo en tres fases. Primero se decretaría la reapertura (progresiva y extremando medidas de higiene) de negocios que no son servicios básicos. En una segunda etapa reabrirían restaurantes y centros educativos y se levantaría la recomendación de no salir de casa a los menores de 70 años (salvo a las inmunodeprimidas). Finalmente, al resto de la población y volverían a permitirse los eventos con más de 50 personas. Los investigadores señalan la importancia del diagnóstico precoz, con el uso de una aplicación móvil que registre datos de ubicación, movilidad y contactos a través de GPS y bluetooth.

El espejo de China

Wuhan, la capital de la provincia de Hubei, la más afectada en China, levantó el miércoles las medidas de confinamiento que mantuvo durante 76 días, desde el 22 enero. Hasta llegar a ese momento icónico en la victoria de China en su lucha contra el virus, las autoridades del gigante asiático, que paralizaron totalmente el país 10 días, levantaron paulatinamente las medidas que aplicaron en el resto del territorio. Los trabajadores se fueron incorporando al trabajo con severos controles y después llegó el momento de reabrir tiendas, restaurantes y lugares de ocio con limitaciones de aforo. También se han retomado las clases en algunas provincias, aunque otras siguen con las aulas cerradas.