El maillot de Nairo Quintana voló al quitamiedos

Javalambre nunca ha acogido el final de una etapa de la Vuelta a España, pero sí lo ha hecho en dos ocasiones Valdelinares, la otra estación turolense de esquí del Sistema Ibérico, ambas separadas por 80 kilómetros.

El primer ganador en Valdelinares fue Roberto Heras, que se impuso en 2005 y se enfundó el maillot de líder, que cedió tres días después ante Denis Menchov, para volver a recuperarlo, ya hasta el final, con un espectacular ataque camino de Pajares. Al término de aquella Vuelta, Heras dio positivo con EPO y fue desposeído del triunfo. Un juez español se lo devolvió años después por defecto de forma, aunque la UCI, con sede en Suiza, nunca lo ha validado.

La segunda visita a Valdelinares es más reciente, de 2014, en una jornada con festival colombiano. Winner Anacona ganó bajo la lluvia, al rematar una nutrida fuga, y Nairo Quintana arrebató el maillot rojo a su compañero Alejandro Valverde, que no tuvo un buen día, por tres segundos sobre Alberto Contador.

El liderato fue efímero. Después de un día de reposo, Nairo tenía que defenderlo en una ondulada contrarreloj de 37 kilómetros en Borja. El colombiano no iba mal, había marcado el quinto tiempo en el primer paso intermedio, a 20" de Contador, cuando tuvo la infeliz idea de ajustarse la zapatilla en un descenso, perdió la trazada y se golpeó contra un quitamiedos.

Quintana, muy dolorido, retomó la ruta y llegó a la meta, aunque con un retraso de 4:07 respecto al ganador, Tony Martin. Ese día no abandonó, pero sí al siguiente en tierras navarras, cuando se vio inmerso en otra caída, una montonera, y tuvo que salir de la carrera en ambulancia, con la escápula derecha fracturada.