Holiday da inicio al desmembramiento de Boston
Los Celtics traspasan al base a Portland, de donde llegó hace dos años. Reciben a Anfernee Simmons, dos rondas y salvan 40 millones en impuestos.
No es que hiciese falta que acabasen las Finales para que la maquinaria de fichajes se pusiese en marcha en la NBA (Desmon Bane, Kevin Durant). Pero ahora ya sí que sí no hay que guardar las apariencias. Una vez acabada la competición es tiempo de draft y de traspasos, y los Boston Celtics han sido los primeros en subirse al barco. La franquicia que fuese campeona hace un año y que empezaba la temporada como favorita para repetir, acaba de dar el pistoletazo de salida para desmontar el equipo que le dio su 18º anillo. Jrue Holiday se marcha a los Portland Trail Blazers en un traspaso que manda a Boston a Anfernee Simons y dos segundas rondas de draft.
Holiday regresa a Portland, donde estuvo brevemente en el verano de 2023. Primero fue mandado a la ciudad de Oregón desde Milwaukee como parte del traspaso de Damian Lillard. Y poco después Boston se llevó al base para convertirlo en pieza fundamental de un quinteto inicial que se mostró inabarcable durante la temporada 2023-24. Por supuesto, no llegó a debutar con los Blazers. Con este movimiento los Celtics se van a ahorrar unos 40 millones de dólares en impuestos, ya que a Holiday le quedaban dos años de contrato y 72 millones por cobrar. Con 35 años recién cumplidos y un curso por delante en el que los Celtics parece que ya lo dan por perdido tras la rotura del tendón de Aquiles de su máxima estrella, Jayson Tatum, la salida de Holiday puede no ser la última.
En caso de mantener a toda la plantilla, los Celtics iban a entrar en el segundo apron, lo que supone un gran desembolso en impuestos porque la cantidad total destinada a sueldos supera con creces el limite marcado por la NBA. Los nuevos dueños de la franquicia, liderados por Bill Chilshom, compraron los Celtics por 6.100 millones en marzo de este año y su intención no parece que sea la de tirar el dinero nada más llegar con un equipo que no tenga opciones reales de ganar el anillo. Esa es la cuenta que se está haciendo en Boston con un Tatum lesionado para muchos meses. Kristaps Porzingis podría ser el siguiente en salir e incluso ha aparecido el nombre de Jaylen Brown en algunos rumores, aunque eso parece más difícil de llevar a cabo.
Esta última temporada el veterano jugador ha promediado 11,1 puntos, 4,3 rebotes, 3,9 asistencias, 1,1 robos y un 35,3% en triples. Aunque todavía seguía aportando cosas positivas al juego de Boston, fue evidente que dio un bajón de rendimiento respecto a su primera temporada en los Celtics, cuando acabó en el segundo mejor quinteto defensivo del año y tuvo un impresionante 42,9% de acierto desde la línea de tres. Promedió 13,2 puntos y acabó por encima de la estadística mágica de tiro del 50-40-90.
En el otro lado del traspaso, Anfernee Simons es un escolta de 26 años que fue elegido por los Blazers en el número 24 del draft de 2018. Un jugador con una gran capacidad anotadora que promedia 20 puntos por partido en las últimas cuatro temporadas, las que realmente ha sido un elemento importante dentro de la rotación de Portland. En ese tiempo ha tirado una media de 8,5 triples por partido con un 38,2% de acierto. Teniendo en cuenta que los Celtics basan su ataque en gran medida en el tiro exterior, Simons parece un jugador indicado para el estilo ofensivo de Joe Mazzulla. Pero lo más importante para Boston es que su nuevo jugador acaba contrato el próximo verano, con lo que les da la libertad de decidir si quieren continuar con él o poner ese dinero (este año cobrará 27 millones) en otro sitio.
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