La extraña exclusión de Heurtel y Thompkins del Madrid
El francés y el estadounidense han sido apartados del equipo en la peor crisis del conjunto blanco desde la llegada de Pablo Laso al banquillo.
La peor crisis del Madrid de baloncesto desde el aterrizaje de Pablo Laso en 2011 ya tiene a sus dos primeras víctimas: Trey Thompkins y Thomas Heurtel. Ambos han sido apartados de la disciplina blanca (ya estuvieron fuera contra el Bayern este viernes) y, por el momento, no jugarán más con el equipo, que ha perdido 15 de los últimos 26 partidos y que este domingo visita al Barcelona en el Palau Blaugrana (18:30 horas, #Vamos)
El motivo no está claro, no ha sido desvelado completamente. El entrenador blanco señaló en la rueda de prensa de este sábado previa al Clásico que se debe a una "decisión técnica" tomada por él. El vasco no quiso entrar en más detalles sobre el asunto, aunque aseguró que confía en el resto del grupo: "Tengo confianza plena en que los 13 jugadores que están ahora van a jugar a su mejor nivel y que vamos a volver a ser el equipo que queremos ser. El equipo siempre está por encima de las personas", subrayó.
Thompkins, fuera de forma
El estadounidenese ha sido una de las piedras angulares del proyecto madridista desde su aterrizaje en 2015. Con él, con su calidad y su tendencia a dejarse llevar físicamente en verano, el Real ha sumado una Euroliga (la Décima, donde fue clave en la Final Four), tres Ligas Endesa, tres Copas del Rey y cuatro Supercopas.
Sin embargo, desde 2019, los problemas se han acumulado en su espalda. En el verano de ese año, el estadounidense (2,08 m y 31 años) llegó fuera de peso. “Baja forma”, era la explicación oficial del Madrid, que no le inscribió de primeras ni en la Euroliga ni en la Liga Endesa. Tampoco estuvo en la Supercopa. Se perdió los 18 primeros partidos de una temporada que se cerró de manera abrupta por la pandemia del coronavirus. El primer caso conocido de la COVID en el baloncesto español fue él.
El 2021 tampoco le fue mejor. En mayo, tras un buen cruce de cuartos frente al Efes (en los dos primeros duelos en Turquía fue el mejor), se le detectó un problema en la rodilla izquierda que le hizo someterse a una artroscopia. El ala-pívot se perdió los siguientes 44 partidos hasta su retorno en enero después de poco más de 8 meses (256 días) de baja. Su ausencia se prolongó más de la cuenta por una inflamación en la rodilla en la recta final de su recuperación, cuando ya entrenaba. Hasta ser apartado por Laso, Thompkins había disputado tres encuentros en ACB y 13 en la máxima competición continental. El próximo 30 de junio acaba contrato.
Heurtel, del Barça al Madrid
La situación de Heurtel (1,89 m y 32 años) es más complicada que la de su compañero. Sobre todo, si atendemos a sus dos últimos años en España entre el Barcelona y el Madrid. Su paso por el conjunto azulgrana tuvo luces (dos Copas con dos MVP del torneo) y un mal final tras la llegada de Sarunas Jasikevicus al banquillo. En diciembre de 2020, el lituano dejó de contar con el francés, al que se le dio vía libre para negociar con otros clubes y así salir del Barça.
Un escenario positivo para ambas partes, que se enturbió cuando Heurtel jugó a dos bandas con los azulgranas: a pesar de estar con un pie y medio fuera, el base viajó con el equipo, que se enfrentaba el 22 de diciembre al Efes, para negociar una supuesta incorporación con el Fenerbahçe. En verdad, trataba de llegar a un acuerdo con el Madrid, lo que provocó una reacción en cadena, con la expedición de vuelta a la Ciudad Condal y el galo en tierra, en Estambul, tras impedírsele subir al avión con sus compañeros.
La pandemia no estaba ni de lejos controlada y el Barça había dejado tirado a su jugador (con hotel y billete de avión, según ellos) en Turquía. Las críticas al conjunto culé fueron inmediatas y airadas. “Es pueril”, aseguró la ABP, el sindicato de jugadores de España. “Es inexcusable”, sentenció la ELPA (Asociación de Jugadores de la Euroliga). El jugador y su agente amagaron con una demanda.
Heurtel rescindió su contrato el 19 de enero. Ese mismo día se confirmó extraoficialmente su llegada, con un contrato de 1+1, al Madrid. Hasta que su fichaje se hizo oficial el 6 de julio, el base se mantuvo en activo entre la selección francesa y el Asvel Villeurbanne, con el que jugó la Liga de su país.
Su rendimiento en el Madrid no ha sido el esperado y ya tuvo algún gesto airado hacia Laso, como ante el Lenovo Tenerife cuando fue sustituido. En la Euroliga, ha promediado 9 puntos y 4,6 asistencias en 27 partidos con 19 minutos de media. En la ACB, su papel es similar: 8,6 y 4,4 en 25 encuentros con 18 minutos. Sin embargo, las sensaciones como director de juego no han sido buenas. Este verano tiene una opción de corte por parte del club por una cantidad que no rebasa los 100.000 euros, aunque puede haber antes un acuerdo de rescisión.