El exjugador de la NBA, Kevin Garnett, planea hacer una oferta de 200 millones de dólares para hacerse con el control deportivo de su antiguo equipo, los Timberwolves. En un inicio, se habló del interés de la que fuera estrella de la mejor Liga del mundo en hacerse con el control total de una franquicia cuyo dueño es Glenn Taylor, pero la entidad, tasada en 1,2 millones, se va de presupuesto incluso para Garnett.

Incluso, porque Garnett es el jugador que más dinero se ha llevado, solo en contratos, de la historia de la NBA, con un total de 334 millones en salarios. Y eso sin contar los beneficios que se lleva por publicidad. Sin embargo, esas cifras no se acercan a la tasación de los Wolves, por lo que el jugador ofrecería 200 millones para poder controlar la parte deportiva, decidir el entrenador y los movimientos que se hagan entre los miembros de la plantilla.

En NBC Sports, portal en el que se recoge la noticia, dudan de que Garnett pueda hacer un desembolso semejante, y de momento lo único que se conoce es el interés real del ala-pívot para dar un paso adelante. Garnett tiene una vinculación tremenda con los Wolves, con los que estuvo los primeros 12 años de su carrera y con los que se retiró en 2016, tras 21 temporada en la NBA, como una auténtica leyenda.