Vuelve Davis y los Lakers se dan un homenaje ante los Warriors

Segunda victoria consecutiva de los Lakers ante los Warriors en el Staples Center aunque, una vez más, los subcampeones jugaron a medio gas y Stephen Curry ni siquiera saltó a la cancha. Al final fue 126-93 en un partido que no tuvo demasiada historia ya desde el primer cuarto. Con todos los titulares de los Warriors salvo D'Angello Russell haciendo un partido muy flojo y con poca aportación del banquillo los de San Francisco tuvieron poco que hacer ante un equipo que se tomó mucho más en serio el amistoso.

La buena noticia de la noche estuvo en los locales, que vieron como volvía su nueva estrella. Anthony Davis se produjo un esguince en el dedo pulgar de su mano derecha en el segundo partido ante los Nets en China, hace cinco días, pero al final se ha quedado en una anécdota. El ala-pívot fue titular y jugó 28 minutos. Fue el laker que más tiempo estuvo en pista y, aunque no firmó grandes números en anotación (8 puntos en una serie de 3/9), sí que le dio tiempo a coger 10 rebotes y repartir 8 asistencias. Este último dato no sorprende dentro de lo que fue una actuación coral y solidaria en ataque.

Hasta once jugadores anotaron al menos 6 puntos y los que más metieron (LeBron y Bradley) se quedaron en 18. Por tanto, ninguna exhibición individual y sí mucho trabajo de equipo, al que le benefició obviamente las circunstancias del rival. Pero empiezan a verse síntomas positivos en los angelinos más allá de sus dos estrellas. Howard volvió a dejar buenos minutos (13+7) y McGee parece seguir por la buena senda del año pasado (12+6). Por fuera, aparte del ya nombrado Bradley, destacó un ex de los Warriors, Quinn Cook, con 16 puntos y un 4/5 en triples. Si consigue mantener una regularidad desde la línea de tres se convertirá sin duda en una pieza muy valiosa para su nuevo equipo.