Durant mantiene el tipo y Golden State se recupera de la debacle

Los Warriors despertaron de la pesadilla que les había venido a la mente cuando protagonizaron en el bando perdedor la mayor remontada de la historia de los NBA Playoffs, 31 puntos, a manos de los Clippers. Tocaba resarcirse y los de Steve Kerr sacaron su raza de campeón, que es lo que son hasta que otro diga lo contrario, para marcar territorio de nuevo en esta eliminatoria, que se pone 2-1.

El inicio fue incontestable y fue lo que cimentó el gran triunfo del equipo de Oakland. Los Clippers estaban anestesiados por el ritmo impuesto por su rival: Curry manejaba a su antojo y también se animaba a ejecutar, Iguodala aportaba la sapiencia necesaria en los dos lados y Looney se metía por donde no había hueco para machacar. Era un auténtico baile y las proyecciones de puntos se iba a números altos. Los Warriors cogieron rápidamente una ventaja que bordeaba los 15 puntos y ya no bajaron el pistón.

Ya lo podían hacer muy bien los locales, poco había que rascar. Golden State no se podía dejar por segundo partido consecutivo una ventaja tan golosa por el camino. El momento lo aprovechó Kevin Durant para, sobre todo con una racha gloriosa en el segundo cuarto, hacer caja y números: 38 puntos anotó el alero y eso que falló 7 triples. Durant ha centrado buena parte de lo que va de serie por el emparejamiento que ha sufrido, y con todo el peso de la palabra, junto a Pat Beverley, que le intenta hacer la vida imposible en una estrategia que claramente tiene bastante lógica pero que no surte tanto efecto habiendo otros tiradores que están acertados en el lanzamiento y teniendo que ocuparse de varios flancos al mismo tiempo.

Destacamos a Durant porque sus números le dan como líder de este partido, pero viendo el mismo aprecias la fuerza del grupo que hay en estos Warriors cuando la relajación no les azota. Eso es contra lo que tienen que luchar, lo hablábamos el pasado octubre y lo hablamos ahora: poco ha cambiado.

Sólo se pudo ver algún buen detalle del equipo de Los Ángeles en el juego interior, aunque ínfimo y con trampa: Green sumó tres triples y Zubac, único con doble-doble, aprovechó un último cuarto ya sin oposición para sumar.