Los Spurs siguen de dulce y ya piensan en la ventaja de campo

Parece increíble que estemos hablando de que los San Antonio Spurs puedan tener ventaja de campo en la primera ronda de playoffs, pero a estas alturas ya no parece imposible. Con un calendario bastante amable comparado con el de los Thunder (quintos), aunque no tanto como el de los Blazers (cuartos), los texanos (sextos) llevan ocho victorias consecutivas (diez en casa) y son el equipo más en forma de toda la Liga.

Anoche tuvieron algo de ayuda con la lesión de C.J. McCollum al inicio del tercer cuarto. El escolta se hizo daño en el tobillo izquierda, que se le dobló de forma exagerada al caer al suelo después de una penetración a canasta. El jugador, con claras muestras de dolor y sin poder apoyar el pie, se tuvo que marchar de la pista. En ese momento el partido estaba igualado después de haber pasado por dos tramos. Uno primero con dominio de los locales y con DeRozan (21+8+3) y Aldrige (12+8 y 3 tapones) metiendo 21 de los primeros 23 puntos de su equipo. El segundo tramo, con los visitantes tomando el mando en unos grandes minutos de Jusuf Nurkic (24+16+4+2).

Se llegó al último cuarto con ventaja de los de Portland y con un Damian Lillard (34+6+5) ya como claro y casi único referente en ataque. Pero entonces, con las dos estrellas de los Spurs algo desaparecidas, tomaron la iniciativa otros jugadores que suelen tener menos titulares pero que están siendo importantísimos en esta buena racha de juego y resultados.

Sobre todo Derrick White (13 puntos) y Bryn Forbes (11) fueron los grandes artífices de la ventaja de los texanos en los últimos minutos, pero antes también Gay (13+7), Mills (12 y 4 asistencias), Belinelli (11 y 4 rebotes) y Bertans (7+5+2 y +17 con él en pista) también hicieron mucho por mantener la victoria en casa.