Los Warriors arollan a unos Spurs sin DeRozan ni Aldrige

En Oakland hubo partido hasta que faltaban 5 minutos del primer cuarto. En ese momento los Spurs iban 3 arriba. Fue entonces cuando se enchufó Kevin Durant (23+8+9+3). Poco después se le unió Klay Thompson (26 y 6 asistencias), y después Curry (19+5+7+2) y finalmente Iguodala (11+6+4) y no hubo manera de parar el vendaval que les llegó a los texanos desde la Bahía.

No es que nadie esperase una victoria Spurs en su visita a los campeones. Más que nada porque no contaron con sus dos mejores jugadores, DeMar DeRozan y LaMarcus Aldrige. Pero lo que ocurrió fue el desastre más absoluto, que hasta bien entrado el segundo cuarto pudieron evitar, pero que una serie de errores y pérdidas en los últimos minutos antes del descanso hizo que el partido se les escapara para siempre.

El tercer cuarto fue una auténtica masacre. Los Warriors metieron 17 de los 22 tiros que intentaron y acabaron con 49 puntos. Era el récord de puntos recibidos por los de San Antonio en un cuarto en toda su historia. A esas alturas ya llevaban 115 encajados. No les metían tantos en tres cuartos desde 1990. ¿Quieren más datos? Con Gregg Popovich de entrenador es la cuarta vez que les meten 140 puntos. Todas ellas han sido esta temporada. Y uno más. Es la cuarta vez esta temporada que pierden por más de 30 puntos, la que más desde la 88/89.

Hasta trece jugadores de los Warriors saltaron a la pista en un encuentro de relax para ellos, en el que nadie jugó más de 28 minutos. A los Spurs no les queda otra que olvidar rápido este mal trago y pensar en lo que tienen esta noche. Un partido clave en Portland, cuarto clasificado del Oeste, que sólo está a una victoria y media de distancia. Esta sí es su liga y aquí es donde tienen que darlo todo.