NBA | CELTICS 121 - SIXERS 114
Irving se viste de superhéroe y los Celtics ganan otra vez a los Sixers
El base (40+10), metió dos triples seguidos en la prórroga para sentenciar. 9ª derrota de los Sixers ante los Celtics en los últimos 11 partidos.
La rivalidad histórica entre Celtics y Sixers, que amenaza con volver por todo lo alto ya desde el año pasado, de momento tiene un claro vencedor. Los Celtics le tienen tomada la medida a estos Sixers del Proceso, que sólo han sido capaces de ganarle dos de los últimos once partidos en los que se han visto las caras. Es decir, desde que están Embiid y Simmons juntos. El último de los cuatro enfrentamiento de liga regular del año pasado y el cuarto partido de las semifinales de conferencia, ya con un 3-0 demoledor para los de Boston.
Anoche estuvieron más cerca que la mayoría de veces. Sin ir más lejos en el partido inaugural de esta temporada, cuando los Celtics les dieron un auténtico repaso. Esta vez llegaron a la prórroga, jugando mejor el último cuarto y con un lanzamiento de dos de J.J. Redick para ganar que no acertó. Lo que no sabían es que para Kyrie Irving no era un partido más. Al final del mismo confesó a los periodistas que había más de 20 familiares en las gradas que habían venido a verle y que estaba extramotivado. Una razón tan válida como otra cualquiera. El caso es que se empeñó en ganar el partido y lo hizo.
Salió a por todas y en el primer cuarto ya llevaba 16 puntos. Él fue quien metió la canasta que empató el partido para los suyos forzando la prórroga y, una vez ahí, demostró que es el jugador más en forma de todos los que estaban en pista. Justo cuando quedaba la mitad del tiempo extra por jugarse y con los Sixers 2 arriba, metió dos triples consecutivos, absolutamente monumentales y decisivos. Los de Philadelphia no pudieron, o no supieron, levantarse ante semejante bofetada. Su línea estadística final habla por sí sola: 40 puntos (17/33 en tiros de campo, 5/10 en triples), 10 rebotes, 3 asistencias y +19 con él en cancha. Y se une a Durant, Wade y Harden como los únicos jugadores en activo con partidos de 40 puntos en el día de Navidad.
En los Sixers el más destacado fue Joel Embiid. Acabó con 34 puntos y 16 rebotes. Al descanso llevaba 19 y 9. Con esos números los Sixers han perdido siempre. ¿Simple casualidad o un síntoma sobre el que deberían reflexionar? Su quinteto titular estuvo al completo en dobles dígitos después de que Brett Brown dijese que era el mejor de la liga. Se puede discutir sobre este tema, pero lo que no tiene discusión es que necesita algo más en el banquillo si quiere que su equipo sea un candidato real a, de momento, meterse en la final de la NBA. Ayer sólo jugaron 4 jugadores y entre todos aportaron 13 puntos.