"Gran Canaria está muy orgullosa de este equipo"

Gran Canaria vivirá la próxima temporada en un eterno carnaval. El equipo isleño disputará la Euroliga por primera vez en su historia tras vencer al Valencia en el tercer partido de cuartos del playoff y clasificarse por segunda vez en sus 55 años de existencia para las semifinales de la Liga Endesa. “La Isla está muy contenta y orgullosa de este equipo. Nuestra afición se lo merece. Nos hemos puesto en lo máximo, pero debemos tener los pies en el suelo: sabemos quienes somos”, dijo Juan Ramón Marrero, director ejecutivo del Herbalife, durante su visita a As junto a dos buques insignias tanto del baloncesto español como del club canario: el entrenador Luis Casimiro y el base Albert Oliver. “Lo que hemos hecho es para estar muy contentos. Han sido cuatro partidos en seis días y casi no nos ha dado tiempo para pensar en ello”, comentó el técnico manchego de 57 años. “No soy muy consciente aún de lo que hemos logrado”, contó Oliver con una sonrisa, el dedo protegido después de sufrir una luxación ante el Madrid y con sus estrenados 40.

Ayer fue su cumpleaños y antes de soplar las velas afirmó que “está más fibrado que hace cinco años”. Su físico y nivel durante todo el curso así lo confirman: 46 partidos disputados entre Liga y Eurocup, y debut con España en la primera Ventana para el Mundial 2019: “Veía casi imposible jugar con la Selección y en la Euroliga...”, señaló el de Tarrasa que ha cumplido muchos de sus sueños desde que aterrizó en el Herbalife. “Soy especialista en bases que no se meten en fregados y se lesionan poco como él, Chichi Creus...”, alabó Casimiro a su pupilo. El entrenador estaba también de aniversario: ayer se cumplieron 20 años del campeonato liguero conquistado por el TDK Manresa con él en el banquillo.

Fue una de las grandes hazañas del baloncesto patrio. Los catalanes ganaron al Estudiantes, Madrid y Baskonia sucesivamente hasta alzar el título sin factor cancha a su favor en todo el playoff. El Granca tampoco cuenta con él este año. “Hay ciertas similitudes en ambos casos, pero algo muy diferente: la confección de los equipos”, apuntó Casimiro. “Antes solo eran tres extranjeros y el resto nacionales. Eso igualaba la competición y con españoles buenos se hacía un poco más llevadero igualarse con los grandes. Las distancias ahora son mucho mayores”. Esas diferencias no han impedido al equipo amarillo crecer con el paso del tiempo. Desde 2002, solo ha faltado dos veces a la fase final por el título. “El secreto es la estabilidad. El club no se pone nunca nervioso. Hay mucha paciencia con los jugadores”, dijo Oliver. Casimiro continuó en la misma línea: “Tienen un gran criterio deportivo y siempre entrenadores con una filosofía semejante”. “Somos pequeños pero ambiciosos dentro de nuestras posibilidades”, apuntó Marrero.

El directivo es consciente de las dificultades que se van a presentar por la ilusionante presencia del equipo en una Euroliga a la que ya está preinscrito. Aunque ya se ha quitado un peso de encima: la competición disipó las dudas sobre su participación, pues la norma que impide jugar en ella si estás a más de cuatro horas en avión desde Fráncfort tampoco se cumplía en la Eurocup. “A los viajes te acostumbras. Eso sí, en mi vida pensé que iba a leer tanto”, reveló Casimiro. “Cultivamos a nuestros entrenadores”, añadió entre risas Marrero. El Gran Canaria vuelve a jugar hoy contra el Madrid y el cielo es el límite.