Tres de cuatro: la Final Four de San Antonio ya conoce al 75% de sus participantes y si el sábado había dejado una semifinal que nadie había previsto (Michigan-Loyola Chicago), el primer representante por el otro lado del cuadro sí cumplió con el guion lógico: Villanova sale vivo del Este después de sortear en Boston a la competitiva Texas Tech (71-59), que fue siempre a remolque pero se las apañó para llegar con opciones a los últimos minutos.

Pero Villanova no falló: más del 58% de los brackets la ponían en la Final Four, más que a ningún otro equipo del país. Ahora llegará a las semifinales como favorita en su segunda FF en tres años: en 2016 se proclamó campeona ante North Carolina. Era el equipo de Ryan Arcidiacono, Josh Hart, Daniel Ochefu y Mikal Bridges, por entonces freshman y ahora (con un buen futuro NBA a la vista) anotó 12 puntos para acompañar a los 15 de Jalen Brunson. Keenan Evans (12) fue el máximo anotador de Texas Tech, que no llegó a los 63 puntos… y Villanova está 88-0 en las últimas cuatro temporadas cuando su rival ni anota al menos esa cifra de puntos.

Un período de cuatro años en la que los de Jay Wright suman 134 victorias, récord en Division I por delante ya de la Duke 1997-2001. Villanova no pierde desde el 24 de febrero y esta vez no necesitó ese ataque ultra eficiente de altos porcentajes y pocas pérdidas. También supo ganar en la batalla de defensas que plantearon los muy meritorios Red Raiders de Texas Tech. Pero la que avanza en Villanova. Un poco de lógica en la Locura de Marzo…