San Emeterio neutraliza a un Andorra que remontó 21 puntos

El Valencia Basket rompió la racha de seis derrotas seguidas que acumulaba desde hace varias semanas. Y lo hizo gracias a un San Emeterio gigantesco, que firmó uno de sus mejores partidos en el conjunto taronja (35 puntos, 9 rebotes y 42 de valoración). Sin embargo, el conjunto de Vidorreta no disipa las dudas que le persiguen. Una vez más, igual que ante Armani Milán y Brose Bamberg, tiró por la borda una renta muy amplia, con el partido avanzado. Esta vez fueron 21 puntos, a unos segundos del descanso. El equipo taronja va con la lengua fuera. Su calidad y esfuerzo de sus jugadores está fuera de duda pero los partidos se le hacen larguísimos debido a las numerosas bajas de larga duración. La victoria ante Morabanc Andorra no debe empañar la decisión de fichar. Es necesario fichar ya que tiene un quinteto, que podría ser titular, lesionado: Diot, Abalde, Sastre, Williams y Dubljevic.

Y eso que los taronjas empezaron como un tiro impulsados por un gran Doornekamp. Pronto cogió ventajas importantes (21-7). Tanto que Peñarroya cambió el quinteto entero y la cosa mejoró para los andorranos. En el segundo cuarto, San Emeterio comenzó su clínic y el Valencia casi dejó el partido resuelto (48-27, min. 19). Había que hacerlo muy mal en la segunda parte y que el Andorra lo hiciera muy bien para que el partido se diera la vuelta. Y se dieron las dos cosas. Con Jaime Fernández en la dirección y Jaka Blazic martilleando el aro taronja, las ventajas fueron diluyéndose. Un mate, sobre la bocina del tercer cuarto, de Stelvic, dio el último empujón necesario a los andorranos (58-50). En Valencia sólo anotaba San Emeterio (anotó 16 de los 25 puntos taronjas en la segunda mitad). Y en el último cuarto apareció Jelinek. Un triple de San Emeterio pareció romper el partido (72-63), a falta de dos minutos. Y además con el balón en su poder. El parcial para empatar el partido fue de 1-10 (5 de Fernández y 5 de Jelinek). Aún le quedaban 7 segundos a San Emeterio para sentenciar. Pero falló. Prórroga.

Emoción en la prórroga

En el tiempo añadido, Van Rossom se unió a un San Emeterio que ya iba sin cadena pero Blazic también tenía la muñeca caliente. Una canasta de Green, muy desacertado durante todo el choque, puso el 88-84, quedando 19 segundos para el final. Pero Blazic, a falta de 8 segundos, anotó un triple que aún le daba opciones al Andorra. Más aún cuando San Emeterio falló uno de los dos tiros libres que forzó el equipo de Peñarroya. Con 4 segundos por jugar, Jaime Fernández falló en su penetración y Stelvic tampoco anotó en la segunda opción.