El municipio burgalés de Aranda de Duero sigue sin doblar la curva de contagios por coronavirus. La situación sigue complicándose y este martes la Junta de Castilla y León ha anunciado que la ciudad ya suma en total 450 casos, después de detectar 78 más en las últimas 24 horas.

La preocupante situación que vive Aranda de Duero obligó al Gobierno regional a decretar el confinamiento de la ciudad durante 14 días por los 16 brotes que se habían detectado en la ciudad el pasado jueves. Así, desde el viernes la ciudad está aislada y no se puede salir y entrar a la localidad salvo por obligaciones laborales, retorno a la residencia habitual, asistencia y cuidado de mayores o personas dependientes, asistencia a centros sanitarios o cualquier causa de fuerza mayor o urgente.

Además, quedaron suspendidas las visitas a las residencias de mayores y se suspenden las salidas de éstos al exterior de los centros. Asimismo, las reuniones de carácter privado se limitan a 10 personas y quedaron prohibidas por el momento las actividades de las peñas. Por último, la Junta recomienda a los habitantes de Aranda de Duero solo salir de sus hogares para actividades esenciales.

El juez reduce el aislamiento a siete días

El confinamiento, en un primero momento, fue decretado por 14 días, pero el Juzgado de lo Contencioso número 1 de Burgos ha reducido las dos semanas impuestas por el Gobierno a solo una, si bien la Junta podrá solicitar en función de los datos epidemiológicos y de rastreo. Dos días ante del viernes, es decir, mañana miércoles, el Ejecutivo autonómico tendrá que facilitar esa información al juzgado, que evaluará los datos y decidirá si el confinamiento se alarga durante otra semana más.

El Juzgado admite que en su escrito que la decisión de confinar Aranda de Duero está justificada por el aumento significativo de contagios por coronavirus en la localidad, pero considera por el momento no necesario un confinamiento de 14 días porque “los servicios sanitarios funcionan con normalidad”. Además, pide a la Administración que refuerce los mecanismos de identificación y localización de personas infectadas para imponer las medidas individuales de confinamiento necesarias.

La evolución epidemiológica marcará si se prorroga el confinamiento

A pesar de que el juez decretó que el confinamiento se alargaría de momento hasta el próximo viernes, la situación epidemiológica parece indicar que ese confinamiento será prorrogado otra semana más. Los datos evidencian que de momento las medidas impuestas no han surtido efecto, puesto que suelen tardar unas dos semanas en causar impacto en los contagios. Las cifras revelan que la curva aún está en ascenso y diariamente siguen aumentando los casos.

Aranda de Duero, junto a los municipios vallisoletanos de Íscar y Pedrajas, son tres de los municipios que actualmente están confinados por los contagios que han sufrido en su territorio. La Junta regional, para atajar los brotes, no ha dudado y ha optado por una medida drástica para tratar de frenar la transmisión. El Gobierno autonómico está muy vigilante con la situación de los últimos días. De hecho, según la última actualización de datos, se han añadido a la serie 599 positivos, el peor dato desde que el 21 de junio se levantó el estado de alarma y se inició la nueva normalidad.