‘Kaku’ Romero aprende, juega, sonríe y no pone excusas
Alejandro Romero es cada vez más influyente, estudia inglés y constantemente recibe llamadas de ex compañeros que le quieren seguir en la MLS
Después de ser una de las grandes novelas del mercado antes de arrancar la MLS este año, finalmente llegar a la liga, y tener que esperar la oportunidad, el argentino Alejandro ‘Kaku’ Romero Gamarra se siente cómodo y empieza a ser influyente.
Kaku apareció por primera vez en el Equipo Ideal de la Semana, tras marcar un gol y asistir dos en el más reciente encuentro de New York Red Bulls. El volante de 23 años conversó con AS USA acerca de su presente y las dificultades en la adaptación.
“Al principio me costó, pero más que nada porque ya mi cabeza estaba dándole vueltas a que el traspaso no se iba a dar”, reveló Alejandro al recordar los casi dos meses y medio que el negocio estuvo en altas y bajas luego que un ex representante suyo interpusiera un recurso para ser parte del negocio que se hacía entre los clubes (Club Atlético Huracán y RBNY).
Tan así parece ser el tema de la adaptación, que el entrenador del equipo rojo de Nueva York, Jesse Marsch, recibió críticas por no darle más participación en la Liga de Campeones de Concacaf. El técnico terminó por aceptar tras la eliminación del torneo, que era hora de “soltarle las cadenas” al argentino.
“Estuve esperando mucho para llegar a Red Bulls, y la verdad que ahora estoy muy contento y disfrutando del presente”, dijo Kaku quien ya suma seis partidos (todos como titular), con dos goles y cuatro asistencias. “Cada vez me voy soltando más y me siento muy bien con la confianza de Jesse y de todo el equipo”, aseguró.
La historia de ‘Kaku’ es una de tenacidad y golpes duros. Parte de una familia con más de 12 miembros, Alejandro es el único que hasta ahora es futbolista profesional (dos hermanos menores intentan lograrlo en Argentina), estuvo en el grave accidente de Huracán en Venezuela cuando el bus que transportaba al equipo se volteó a alta velocidad, y en 2017 falleció su madre, que era la roca de la familia.
“En honor a ella empecé usando mi apellido en los primeros partidos con Red Bulls, pero ya estaba acordado con el equipo y ya cambié para usar de ahora en adelante el Kaku”, contó.
Para quienes no saben, su apodo surgió cuando siendo niño un entrenador quiso compararlo con Ricardo ‘Kaká’ y terminó llamándole ‘Kaku’. Así se quedó el diminuto volante ofensivo que llegó a más de 100 partidos con Huracán.
Ese es el club de sus amores, y ‘Kaku’ no le pierde la pista. “Sí lo sigo siempre y estamos muy contentos con los recientes resultados”. ‘El Globo’ como se le conoce al equipo, se encuentra cuarto en la tabla general de la Super Liga Argentina.
Y aunque para muchos la MLS es una liga muy física y que maltrata al habilidoso, Alejandro en cambio no es tan extremista. “Acá encuentro espacios y puedo jugar tranquilo. En Argentina siento que pegan un poco más, y hay equipos que te siguen a todos lados en la marca”, aseguró.
Obviamente el otro factor diferente es el idioma, pero Kaku no da ventajas, “estoy estudiando para poderme adaptar cada vez más a mis compañeros”. Otra muestra de su dedicación y esfuerzo por ser un jugador de impacto.
Él no esconde su mentalidad, “me falta un poco por entender de la filosofía que tiene el técnico, pero creo que de a poco lo estoy encontrando y me tengo mucha confianza de que puedo ser importante para el equipo”.
Claramente el momento es para disfrutar, tanto dentro como fuera del terreno de juego. “Disfruto todo. La gente, como se nota el crecimiento de la liga es impresionante” y ni siquiera los largos viajes, de los que muchos recién llegados se quejan, le amargan el rato.
“No hay excusas”, dijo al respecto. “Todo está preparado y viajamos dos o tres días antes de un partido”. Al contrario, los desplazamientos son otra razón para sonreír. “Los lugares son todos hermosos, nunca me había tocado viajar antes a estas ciudades, así que lo disfruto mucho”.
En el terreno de juego, la adaptación va dando sus frutos y ‘Kaku’ le va llenando el ojo a Marsch. “Se presiona constantemente y eso hace que me tenga que acostumbrar. Pero algo de eso hacía en Huracán aunque por la banda. Ahora es otra posición más central y la voy sintiendo bien”.
A pesar de los obstáculos al principio, la experiencia es tan enriquecedora para ‘Kaku’ que sus palabras tienen eco entre los ex compañeros. “Todos los que me escriben de Argentina quieren venir para acá, pero les repito todas las semanas que no soy presidente de club, sino me los traía a todos”, soltó entre otra de sus habituales sonrisas.